Perlora (Carreño),

Braulio FERNÁNDEZ

La playa de Huelgues, en Perlora, fue clausurada ayer al baño pocos minutos después de las doce del mediodía. La decisión de colocar la bandera roja se tomó después de que los responsables del servicio de salvamento vieran salir del agua a varios menores con manchas de «galipote» adherido al cuerpo, sumado a la existencia de pequeños hilos de fuelóleo flotando entre el pedrero.

Este pequeño arenal, más bien pedrero, permanecía como el único de toda la rasa carreñense sin la prohibición de baño desde el pasado martes, cuando un vertido incontrolado procedente de la central térmica de Aboño obligó al cierre de las otras cuatro playas del concejo. La medida, como en el resto de los casos, tiene carácter indefinido, hasta que las manchas de combustible desaparezcan.

A pesar del cierre de la playa de Huelgues, la situación en Carreño mejora a medida que transcurren los días desde el vertido, y ayer la imagen que presentaba el litoral era muchos menos preocupante que en jornadas previas. Tal es la mejoría, que el operativo de limpieza tiene previsto a partir de hoy desplazarse hasta los pedreros, para llevar a cabo el saneamiento de las rocas situadas en las propias playas.

Para acometer esta labor, según explicó el 112 Asturias, se movilizarán máquinas hidrolimpiadoras, que se sumarán al dispositivo humano y material que ha estado trabajando en el lugar desde el martes. Esta decisión se tomó ayer durante una reunión del comité asesor del plan territorial de contingencias por contaminación marina accidental del Principado de Asturias (Placampa), en La Morgal, desde donde ya se coordina la emergencia por el vertido. En el último rastreo aéreo realizado por el helicóptero de Bomberos de Asturias, no se han observado restos de consideración. Se mantienen, eso sí, pequeñas líneas de vertido en las zonas de Aboño y Candás, así como en Tazones (Villaviciosa) y el puerto de El Musel en Gijón.

A pesar de eso, ya están en marcha los preparativos para una gran concentración de protesta contra los responsables del vertido, y que tendrá lugar en Candás, el próximo sábado, 7 de julio. Están llamados a acudir todos los colectivos vecinales del concejo, asociaciones deportivas, culturales, partidos políticos, y asociaciones ecologistas. La concentración tendrá lugar en la playa de Palmera de la capital del concejo, a la una de la tarde.

A pesar de la mejoría que presentan los arenales de Carreño, siguen llegando colectivos a la capital, Candás, para ofrecer su ayuda desinteresada en la limpieza de los arenales. Es el caso del grupo local de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/ Birdlife), que ayer se personó en la villa para ofrecer su apoyo, al tiempo que instó «a las administraciones a poner todos los medios para mitigar el impacto del vertido de fuelóleo». También pidió que «se revisen y refuercen las medidas de seguridad en la central térmica de Aboño, para evitar que se repitan en el futuro episodios de esta naturaleza».

También ayer, un grupo de unos cuarenta mineros visitaron el concejo y mantuvieron una reunión con el alcalde de Carreño, Ángel Riego, para mostrar su voluntad de colaborar en las tareas de limpieza de las playas. No obstante, se les comunicó que la situación está siendo controlada por los profesionales contratados para esta labor, que ya se prolonga durante cuatro jornadas. Por último, el regidor firmó un decreto para que todos los trabajadores municipales colaboren en las tareas de limpieza con el fin de que la situación mejore con vistas a los meses de julio y agosto, temporada alta turística.