Gijón, J. M. C.

Juan Manuel Campos Ansó (La Felguera, 12 de marzo de 1935), que fue concejal del Ayuntamiento gijonés, diputado en la Junta General del Principado y senador del Reino, falleció el pasado miércoles, 26 de septiembre, en Gijón, a los 77 años de edad, víctima de una larga enfermedad. La capilla ardiente quedó instalada en la sala número 3 del tanatorio de Cabueñes. El funeral por su eterno descanso se oficiará hoy, a las 20.00 horas, en la iglesia parroquial Mayor de San Pedro Apóstol. Sus restos mortales serán incinerados en la intimidad familiar.

Campos Ansó era viudo (su esposa, Mari Paz Ron Domínguez-Gil, hermana del arquitecto Álvaro Ron Domínguez-Gil, falleció en el año 2003) y tenía seis hijos: Juan, Gaspar, Javier, Arancha, Ignacio e Inés, y once nietos.

La actividad política de Juan Manuel Campos Ansó -químico de profesión que desarrolló gran parte de su vida laboral en la empresa siderúrgica estatal Ensidesa- se inició en el año 1979, en las primeras elecciones municipales tras el restablecimiento de la democracia en España después de la muerte del general Francisco Franco.

Fue concejal de la primera Corporación de la democracia del Ayuntamiento de Gijón en las filas de la Unión de Centro Democrático (UCD), que lideró Agustín José Antuña Alonso, fallecido también este año.

En la segunda Corporación, la de 1983 a 1987, Juan Manuel Campos Ansó ya formó parte del grupo integrado por la coalición Alianza Popular, el Partido Demócrata Popular (PDP) y la Unión Liberal (AP-PDP-UL), cuyo líder municipal era Francisco Álvarez-Cascos Fernández, a quien el resto de su vida política Juan Campos tendría como faro y guía.

Campos Ansó volvería a ser concejal del Ayuntamiento de Gijón entre los años 1991 y 1995 y en la Corporación de 1999-2003, aunque renunció en el Pleno del 13 de octubre de 2000. Entre 1995 y 1999 también fue diputado del Partido Popular en la Junta General del Principado de Asturias y senador del Reino, electo por Asturias, en la séptima legislatura (2000-2004).

«Juan Campos Ansó era, ante todo, bueno, en el sentido más machadiano de la palabra. Amigo incondicional y colaborador leal, siempre tenía la palabra de ánimo necesaria cuando las cosas no iban bien y era la voz de la prudencia cuando la euforia tendía a desbocarse», comentó ayer la presidenta regional del Partido Popular, Mercedes Fernández, quien acudió a la capilla ardiente de Campos Ansó a testimoniar su pésame a sus hijos.

«Nos conocimos al coincidir en una Corporación municipal, él entonces en el PDP y yo en el PP. La diferencia de siglas no fue obstáculo para entendernos a la perfección; más bien al contrario, porque Juan Campos era un hombre tolerante y respetuoso, con una gran capacidad de diálogo y una enorme empatía», subrayó Mercedes Fernández.

Durante los primeros meses de la Corporación municipal de Gijón de 1999 a 2003 Juan Campos fue el segundo de Mercedes Fernández en el Grupo Popular. «Dotado de una gran capacidad de trabajo, compartimos intensamente muchos proyectos e ilusiones y siempre me entendí muy bien con él. Sentía por Juan una especial debilidad que, me consta, era mutua», añadió la presidenta regional del PP, quien añadió que «aprendí mucho de él y sus consejos me han servido y me siguen siendo útiles, porque la diferencia de edad respecto a mí le otorgaba una gran experiencia política y una extraordinaria sabiduría vital».

Por su parte, Pilar Fernández Pardo, presidenta del PP de Gijón y portavoz del Grupo municipal Popular, «en su nombre y en el del Partido Popular de Gijón», transmitió ayer «su pesar por el fallecimiento de Juan Campos Ansó y sus condolencias a sus familiares».

Afiliado al PP desde 1991, con la ruptura del centro-derecha asturiano después de que Francisco Álvarez-Cascos no fuera designado candidato del PP a la Presidencia del Gobierno del Principado en las elecciones de 2011, Juan Campos Ansó dejó las filas populares, después de firmar una carta de apoyo a la candidatura de Álvarez-Cascos que varios ex concejales del Ayuntamiento de Gijón remitieron al presidente del PP nacional, Mariano Rajoy.

Desde la otra parte del arco político, Vicente Álvarez Areces, que fue alcalde de Gijón entre 1987 y 1999 y presidente del Gobierno de Asturias de 1999 a 2011, lamentó la muerte de Juan Campos, ya que «fue una persona muy representativa y coherente a lo largo de su vida de lo que podríamos simbolizar como un pensamiento político ligado al centro-derecha».

Según Álvarez Areces, Campos Ansó fue integrante de una Corporación municipal en la que «el buen entendimiento, dentro de la discrepancia que había entonces, duró varios años, y que nos permitía discrepar en nuestras ideas pero compartiendo objetivos comunes de ciudad. Él era un gijonés que sentía profundamente los anhelos y las aspiraciones de la ciudad y siempre lo vi como una persona respetuosa en sus intervenciones, cuando existía un clima de respeto y de convivencia que no siempre existe en la política».