Oviedo, M. J. IGLESIAS

El nuevo plan de salvación del oricio asturiano establece por primera vez en la historia la veda de la pesca que comenzó ayer y se prorrogará hasta el 14 de diciembre. Los propios pescadores llevaban meses reclamando a la Consejería de Agroganadería medidas de protección para la especie, cuyo consumo se ha incrementado de forma notable en los últimos años, y pasó de tomarse sólo en invierno -cuando se encuentra en óptimas condiciones- a estar presente en restaurantes y pescaderías todo el año.

El nuevo período hábil para recoger oricios en Asturias será del 15 de diciembre de 2013 al 15 de abril de 2014. La veda afecta a unos cuarenta mariscadores profesionales y a todos los aficionados. La medida obedece al hecho de que en los últimos años se ha producido un gradual aumento en la explotación y comercialización del oricio, lo que ha supuesto una disminución de la población.

El patrón mayor de las cofradías asturianas, Dimas García, asegura que la veda es necesaria «porque de lo contrario en poco tiempo no habrá oricios para nadie». Los pescadores habían solicitado en principio cuatro meses de paro a fin de acoplar los tiempos de pesca al período invernal en el que tradicionalmente se recogían oricios en las costas asturianas.

García explica que la escasez afecta prácticamente a todo el litoral asturiano. «Es una especie que tarda en criarse y no es viable capturarlos todo el año, por que no les da tiempo a desovar, la prueba es que los oricios de verano siempre son de peor calidad», matiza.

Los pescadores no recibirán compensaciones por la suspensión de la actividad. «Esperamos que la recompensa sea recuperar la especie», matiza García. El cierre de la pesca apenas supondrá pérdidas económicas, porque el grueso de las capturas se realiza en invierno. El verano que se avecina será el primero de la historia sin oricios asturianos. García no cree que la hostelería lo note demasiado. «La mayor parte de los que se sirven en los restaurantes en esta época viene de Galicia», recalca.