Después de cuatro horas largas de manifestación por el centro de Oviedo, de media jornada de silbato y bocina, de abundante descarga pirotécnica y algún conato leve de tensión, el presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Asturias, Dimas García, salió a la plaza de España con una hoja de papel en la mano izquierda. Leyó de allí, megáfono en mano y ante cerca de un millar de marineros asturianos y gallegos, lo que la flota pesquera saca en claro de la larga mañana reivindicativa contra el menosprecio de las dos regiones en el reparto de cupos de xarda y chicharro decretado por el Gobierno central. Eran tres párrafos escuetos, el acta levantada tras más de dos horas de reunión con el delegado del Gobierno en Asturias, Gabino de Lorenzo, y una propuesta de solución: su propósito de que la distribución de los cupos de las especies afectadas se efectúe en 2014 con el mismo procedimiento de 2013, "es decir, por segmentos de flota y cuota global para todo el Cantábrico Noroeste". Entienden los pescadores que la mejor solución es dejar cautelarmente sin efecto la distribución entre regiones decidida en Madrid para "negociar con tranquilidad las condiciones de las próximas campañas" y asiente Gabino de Lorenzo, que al decir de García "lo entendió muy bien" y acto seguido se comprometió a hacer llegar las peticiones a la Secretaría General de Pesca y al ministro del ramo, Miguel Arias Cañete.
La lectura pública del acta del acuerdo entre las cofradías dejó una sensación de victoria en una concurrencia ávida de buenas noticias al final de una jornada de huelga con flotas amarradas a puerto y rulas cerradas. "Esperemos que entre todos paren esta injusticia que nos están haciendo", remarcó Dimas García, que prometió "seguir luchando" si el ministerio "no aceptara nuestros postulados" y anunció que la flota mantiene, "por si acaso", sus alegaciones contra la orden ministerial. A ellas se suman a las que el gobierno del Principado anunció que ha presentado "en tiempo y forma" antes de que este fin de semana expire el plazo para hacerlo. El presidente de la Federación redobló ayer además la expresión de su perplejidad ante los criterios de un reparto desigual que consigue que "cada barco vasco pueda pescar 100.000 kilos y uno asturiano del mismo tipo, 15.000". Hay quien atisba detrás un oscuro intercambio de contenido político: "Supongo que algún favor se deberá al País Vasco", afirma García. "No vemos otra razón", le acompaña el representante del cerco gallego, Marcos Vázquez.
La sede de la Delegación del Gobierno había sido la última estación de una larga marcha de recorrido pausado desde la calle Uría hasta la Plaza de España, con parada en la Junta General del Principado para recibir el respaldo de la Consejera de Agroganadería, María Jesús Álvarez, y abundancia de pancartas y banderas y de resonantes consignas contra las decisiones del Ministerio. Del clásico "Cañete, dimisión", al más imaginativo "Mira cómo estoy por culpa de Rajoy". En la comitiva, además de la ruidosa presencia de los marineros, había alcaldes de municipios costeros, entre ellos los de Ribadedeva, Colunga o Cudillero, y al menos medio millar de refuerzos gallegos llegados en ocho autobuses fletados desde Vigo, Cambados, Portosín y La Coruña. También el diputado del Bloque Nacionalista Galego en la Xunta de Galicia Daniel Rodas y hasta el párroco de Lastres, Andrés Fernández, con alzacuellos.
La tensión de la protesta sólo subió algún grado al llegar la manifestación a la Junta, cuando varios jóvenes se subieron a la valla que protege el edificio y se lanzaron algunos petardos al interior del recinto, nada comparable a los graves incidentes de las manifestaciones similares de esta semana en Vigo y Santiago. En el parlamento, los patrones mayores registraron una carta para los diputados y se entrevistaron con la consejera de Agroganadería mientras PSOE, IU y UPyD acordaban impulsar una proposición no de ley con un único punto que insta al Gobierno de España a "reconsiderar el reparto de las cuotas de xarda". "También nos vamos a dirigir al Parlamento Europeo", aseguró la consejera, que anunció además que el Principado no descarta el recurso a la vía judicial "si el Ministerio no rectifica".
Álvarez refrendó su postura sobre "lo incomprensible que resulta que haya un incremento total de cuota del 136 por ciento y los pescadores asturianos no vayan a poder pescar ni la mitad del año pasado". Explica que "la discrepancia se basa en los datos que el Ministerio maneja para establecer el criterio de reparto" y que "estamos de acuerdo con los pescadores en que hay que tener en cuenta los últimos años, porque esta pesquería ha variado, porque se han incorporado barcos nuevos y es en ese periodo cuando ha habido unos criterios comunes de actuación sobre el banco. No tiene sentido que nos remontemos a 2002 salvo que se quiera beneficiar a una región concreta".
Mientras tanto, en el exterior, la flota pesquera de guerra caminó de la Junta a Delegación del Gobierno improvisando sobre la marcha un rodeo por Calvo Sotelo y Llamaquique y tras una sentada en la plaza de España y un minuto de silencio por los compañeros muertos en el Cabo Peñas, Máximo Serrano, patrón jubilado de Avilés, leyó un manifiesto que instaba al gobierno "a demostrar que todos los españoles somos iguales".
En la costa, las flotas permanecían amarradas y las rulas cerradas en una manifestación de unidad de la que el sector pesquero no recordaba precedentes desde la "guerra del tren de bolos", en 2001. Pero en Madrid, el Ministerio no cede. El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, reaccionó ayer a las protestas asegurando que "se han acabado las excusas" para protestar contra las cuotas y que si se suman las de xarda y chicharro, "Galicia y Asturias salen recompensadas" en comparación con Cantabria y País Vasco. "No se puede comparar número de barcos sin tener en cuenta su tamaño", afirma, y este reparto "protege a los más pequeños".
