Los diputados de Podemos además de quedarse solos ayer en la defensa de la rebaja salarial y de las asignaciones a los grupos fueron objeto de crítica por otros portavoces parlamentarios. El socialista Fernando Lastra les acusó de desconocer el funcionamiento del Parlamento al mezclar en su discurso cuestiones como la asignación a los grupos políticos o los sueldos con las partidas para comedores escolares. "Hay un error de planteamiento. Debería ser asumido que la democracia política se apoya sobre la división de poderes. El parlamento tiene un funcionamiento distinto del ejecutivo, aquí podemos orientar, legislar, controlar pero no sustituir al Gobierno en sus responsabilidades. El parlamento no puede poner recursos a disposición del ejecutivo (...) Vienen con gran desconocimiento y falta de precisión de cómo funciona esta institución", valoró Lastra. "El desconocimiento lleva a veces a la imprudencia o a proponer cosas insensatas que no digo que no sean bienintencionadas", advirtió el portavoz del PSOE en la Junta.

"Un nuevo tripartito"

El diputado popular Luis Venta justificó el voto positivo del PP a la propuesta de funcionamiento de la Junta, después de que en los debates previos hubiera estado distanciados de los planteamientos socialistas. "A veces hay que mojarse (...) Los ciudadanos no merecen que los políticos estemos discutiendo por metros arriba o abajo. A quien corresponde el reparto de espacios es al Presidente de la Junta. Igual si hubiera cumplido esa función se hubieran evitado disputas y desacuerdos", argumentó Venta, quien advirtió de "un nuevo tripartito" en la política asturiana entre PSOE, IU y Ciudadanos. "Se están comprando favores de cara a la investidura de Javier Fernández", recalcó el parlamentario popular. Venta adelantó que los diputados del PP renunciarán al complemento por desplazamiento, como ya habían hecho en la anterior legislatura.

Emilio León (Podemos) repartió críticas para el resto de grupos parlamentarios. "Nos hemos quedado, una vez más, al lado de la gente. Hay una gran distancia entre el parlamento y la sociedad". El portavoz del partido morado aprovechó para recordar que la mitad de los asturianos cobra alrededor de mil euros. "La actitud de los representantes tendría que ser ejemplar. Nos gustaría que los parlamentarios, llegado el caso, se comportasen más como la orquesta del Titanic y no como el capitán del Costa Concordia", defendió León. "Quienes han presenciado los peores momentos de la crisis no han tomado decisiones ejemplares, no han sabido estar a la altura y ahora piden que nos apretemos el cinturón mientras ellos llevan tirantes", cuestionó el portavoz morado que aclaró que "los diputados cobrarán entre 4.000 y 5.000 euros y los de Podemos, tres veces el salario mínimo interprofesional", entorno a 1.950 euros netos. León matizó ayer que el resto del salario al que renuncian tendrá dos fines, una para el funcionamiento del partido y otra para proyectos sociales: "Tendremos que hacer una redistribución, una parte irá para los gastos parlamentarios del partido y otra parte, a través del proyecto Impulsa, a iniciativas que decidirá la población". Podemos no ha decidido si renunciará también a una parte de la asignación que le corresponde al grupo, tal y como defendían en su propuesta global. El jueves habrá un Consejo Ciudadano donde analizarán esta cuestión. León también reprochó que algunos de los asesores que paga la Junta General "son asesores del partido que ni pisan el parlamento".

Gaspar Llamazares, de IU, se desmarcó de los reproches podemistas y defendió un modelo salarial "austero", que supondrá un recorte del 10 por ciento en la asignación a los grupos. El portavoz acusó a Podemos de querer convertir el parlamento autonómico "en la antigua Diputación Provincial" y que daría como resultado que algunos asesores eventuales cobrasen el doble que los diputados. "Sería mejor que debatiésemos de lo que les pasa a los asturianos y menos de los que nos pasa a nosotros", concluyó tras rechazar que haya un pacto con el PSOE para la investidura.

Cristina Coto, de Foro, planteó un argumento similar al PP al advertir de que la composición de la Mesa de la Junta "sirvió como moneda de cambio para la investidura". La portavoz forista señaló como problema que "el parlamento languidece porque está al servicio de los intereses del Gobierno". Nicanor García, de Ciudadanos, avanzó que los diputados de su grupo renunciarán al complemento salarial por desplazamiento y negó que "existan pactos por debajo de la mesa" aunque defendió "el diálogo" como pieza clave para la legislatura.