El turismo de salud y bienestar no despega en Asturias, pese que la región figura como uno de los polos más atractivos y con proyección de España según un estudio elaborado por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Los empresarios del sector aseguran que un año después de que se planteara, "no hay ningún proyecto desarrollado, pese a que puede ser clave para ofertar iniciativas novedosas".

La patronal FADE se propuso hace casi un año analizar las posibilidades reales del Principado en el turismo de salud y bienestar y pilotar su impulso, pero a día de hoy no existe proyecto alguno. Eso no quiere decir, según las fuentes consultadas, que haya abandonado su propósito, porque la idea es incluirlo en las comisiones de trabajo de la nueva concertación para asegurar su proyección.

El subsector del turismo de salud y bienestar en España calcula que en 2005 haya movido unos 500 millones de euros, una cifra que se podría duplicar hasta 2020. Algunas comunidades autónomas han visto en él un potente nicho de negocio, en el que se calculan crecimientos anuales de hasta el 20%. Una de las regiones que más fuertemente quiere apostar por él es la limítrofe Galicia, que ofrece desde la práctica de deporte a la relajación con gastronomía y paisajes a precios muy competitivos y que ya busca mercados internacionales.

El Gobierno asturiano también ha mostrado interés por este tipo de turismo, con la idea inconcreta de aglutinar en una única oferta las distintas posibilidades que ofrece la región: salud, naturaleza, cultura, gastronomía, costa y ciudad. Pero de momento no se ha hecho nada.

Fernando Corral, uno de los tres presidentes de Otea (Hostelería y Turismo en Asturias) aseguró que "en el sector no tenemos noticia de que se haya desarrollado ningún proyecto o iniciativa sobre este tipo de turismo, y estaríamos encantados de que desde la iniciativa privada y con la colaboración del Principado se impulsaran proyectos innovadores".

Y es que no se trata de vender sólo los productos tradicionales de Asturias, sino que habría que poner en el mercado, según Corral, ideas nuevas. "Necesitamos desarrollar un subsector que va a ser clave en el futuro, y que en otras regiones ya están moviendo. Pero no es sólo el turismo de salud entendido como balnearios o spas. Hay que apostar por más cosas, como el Camino de Santiago, que se puede potenciar mucho más", afirmó el representante turístico.

Quizás en la concertación se encuentre la oportunidad.