Entre puestos de bollos preñaos, empanadas, quesos y pan de escanda ayer se paseó por Grado una multitud ataviada con el traje tradicional asturiano. La compra en el mercado moscón se hizo con montera picona y pañuelo atado a la cabeza con motivo de la primera fiesta dedicada a la indumentaria regional. El concurso de vestimenta, celebrado en la plaza de la capilla de los Dolores, fue un éxito tanto de participación como de público. Cuarenta aficionados a la costura del siglo XIX -13 hombres y 27 mujeres- desfilaron por una pasarela en la que se sucedieron los piropos, los aplausos y los silbidos. Los mejores fueron Javier Bengoechea Álvarez y Laura Menéndez Fernández.

"Ay, mira qué pañuelo más guapo lleva", "¿Qué me dices de esa saya? Es preciosa", "Vaya pedazo de palo que lleva ése en la mano"... Comentarios de este tipo se oían a ambos lados del escenario. "Lo que pretendemos es que la gente se vista de época, pero bien. Y sobre todo que haya un día en el que pueda ponerse el traje por placer", explica el impulsor del certamen, Alberto Suárez. El jurado valoró el corte y la confección del traje, la manera de vestirlo y la coherencia. Este último aspecto fue el que más falló ayer en Grado, según la experta Fe Santoveña. "Algunos trajes presentaban una gran calidad, sin embargo, en otros se veían piezas ajenas a la indumentaria. Si elegimos una época, todos los elementos tienen que ir acorde a ella", señaló.

Una de las participantes que se subieron al escenario fue Araceli Collar, de Cangas del Narcea. En la pasarela lució manteo, refajo, blusa, chaleco y un mantón de flores que sustituyó al típico dengue. "Lo hice yo todo. No soy modista, así que me llevó bastante tiempo. Me inspiré en los trajes de la zona, pero también incorporé mis gustos. El mandil tiene ganchillo porque me encanta", detalló.

Otra de las que desfilaron ante el público fue la gijonesa Leticia González: "Llevo desde los 4 años vistiéndome con el traje regional y hoy me apetecía sacarlo de casa". González llevaba puesta una mantilla de la zona centro de Asturias con más de 150 años de antigüedad. Entre los modelos masculinos destacó Yoni Martínez, de Colloto, que se llevó el tercer premio: "Yo voy de transición de épocas. En vez de montera picona llevo sombrero".