Hoy se cumple un año del inicio de las movilizaciones del servicio de emergencias del Principado de Asturias y Manuel Sordo ha vuelto a quemarse a lo bonzo como hace doce meses. Dice que en este tiempo no ha habido avances, el Principado sigue dando la callada por respuesta y no hay soluciones a la precariedad laboral.

Para llevar a cabo la protesta los bomberos han contactado con una escuela de especialistas de cine de Madrid que les ha guiado en todo el proceso. Siguiendo la escena en primera fila ha estado la madre de Manuel que no ha podido evitar las lágrimas cuando su hijo desde el suelo ha hecho la señal de que todo ha ido bien.

El representante de CSI en el comité de empresa ha resumido algunas de sus reivindicaciones "pedimos que se elimine la categoría profesional, que se cubran las vacantes y que se reeestructure el servicio, seguiremos protestando los años que hagan falta".

Las reivindicaciones de los bomberos han estado respaldadas por los empleados de la administración regional que convocados por el sindicato CSI han recorrido la calle Uría desde la estación de Renfe hasta la Junta General pidiendo el fin de la precariedad laboral