La causa principal de que los abuelos no puedan o tengan dificultades para ver a sus nietos es el divorcio de los padres. Pero la segunda es el chantaje. Según la presidenta de la asociación Abuelos Separados de sus Nietos, Guadalupe de la Fuente, "muchos hijos utilizan a los niños para extorsionar a sus padres, amenazándoles con que no volverán a verlos si no les dan dinero o les compran algo a lo que financieramente ellos no pueden llegar".
De la Fuente explicó que aproximadamente el 60% de los divorcios son conflictivos y tanto los niños como los abuelos son las víctimas de los daños colaterales, entre ellos que les separen y les dificulten e incluso que les impidan volver a estar juntos. Una situación que, según la presidenta de la organización nacional, "es mucho más habitual de lo que se cree, porque son muchos los que la ocultan incluso por vergüenza". Además, en la mayoría de casos esos abuelos han cuidado y criado a sus nietos mientras sus padres trabajaban, "y de repente los apartan, los separan".
Los abuelos intentan por todos los medios mantener la relación tanto con los hijos como con los nietos, lo que llega a provocar situaciones "terribles", como que "se utilice a los niños para extorsionarlos", afirmó Guadalupe de la Fuente. "Hemos tenido casos como el de un hijo que se quedó al paro y sus padres le ayudaban económicamente. Cuando el hermano se enteró, exigió que le entregaran a él la misma cantidad que le habían dado al otro, amenazándoles con que no volverían los niños a su casa", relató la presidenta del colectivo. Otro ejemplo fue el de otro hijo que exigió un microondas último modelo a cambio de que los abuelos pudieran disfrutar de los nietos.
"Son situaciones terribles en las que si los abuelos no ceden, los hijos ejecutan las amenazas", indicó Guadalupe de la Fuente, quien remarcó que en estas situaciones, uno de los problemas es que las partes desconocen que legalmente se puede reclamar el derecho de mantener el vínculo entre abuelos y nietos.
"No se trata de beneficiar a los abuelos, sino de preservar el derecho de los niños a mantener el contacto y a crecer con sus dos familias, la del padre y la de la madre", remarcó De la Fuente.