Mercedes Fernández goleó ayer en la presentación de avales para el congreso regional del PP a los otros dos candidatos, Carmen Rodríguez Maniega y Pablo Álvarez Pichel, que están más abiertos a unir sus fuerzas. A expensas de la validación de las firmas, los tres han cumplido el primer trámite preceptivo para llegar como candidatos al XVII congreso regional de los populares asturianos. Mercedes Fernández entregó 2.017 avales mientras que Carmen Maniega formalizó 158 y Pablo Pichel 152.

El desequilibrio de fuerzas en el número de avales quedó patente ya en la escenificación de la entrega de las firmas. Mientras Pichel y Maniega llegaron solos a la sede regional del partido, al filo de las doce y media de la mañana, la actual presidenta regional hizo acto de presencia, arropada por un nutrido grupo de dirigentes, con la diputada nacional Susana López Ares, varios parlamentarios autonómicos, entre ellos su "número dos" Luis Venta, e integrantes de Nuevas Generaciones, cuando sus dos posibles contrincantes ya habían abandonado las oficinas populares en la calle Campoamor de Oviedo. No había ninguna gana en coincidir con los dos "outsider", que sí llegaron a verse en la sede al entregar sus respectivos avales, no fuera a ser que tuvieran que darse la mano.

Ahora, el comité organizador tiene tarea por delante durante el fin de semana pues antes de las dos de la tarde deberá revisar todos y cada uno de los avales pare certificar su validez, que no están duplicados, y que corresponden a afiliados que están al día en el pago de las cuotas. De los 19.000 afiliados que el PP estima como su base social en Asturias, han participado en esta primera fase del proceso congresual algo más de 2.300, es decir algo más del 12 por ciento de la militancia. Ayer en la sede había hasta un notario, Carlos Rodríguez-Viña, para dar fe de la documentación entregada.

Mercedes Fernández destacó como "motivo de satisfacción" la procedencia de "toda Asturias" de sus más de dos mil avales, se marcó como prioridad "seguir trabajando para vencer al PSOE, como un partido unido, de centro reformista" y volvió a alertar de los peligros de una bicefalia. También exhibió entre sus logros ser "una de las principales hacedoras" de la coalición electoral con Foro, que permitió una sola opción de centro derecha en las elecciones generales.

Carmen Maniega defendió una concepción "más abierta" del partido, con mayor respecto a la autonomía de las juntas locales y abrió la puerta a un acuerdo con el tercer candidato en liza. "No es una cuestión de personas, sino de formas de ver el partido. Tengo esperanzas de llegar a acuerdos Pichel y poder ganar el congreso", admitió Maniega. Pablo Pichel recogió el guante de una candidatura conjunta con un mensaje sintético: "estoy abierto y dispuesto al diálogo". Eludió dar nombres de sus avalistas, "la gran mayoría afiliados de base" pero aseguró que sus firmas proceden "de toda Asturias". Pichel dice concurrir a este proceso "con mucha ilusión y mucha humildad" en búsqueda de "un partido asentado en el terreno, más permeable y que genere una mayor empatía con los asturianos".