Dos veces al año la playa de Ribadesella se convierte en escenario de un espectáculo único de gran belleza plástica y con un poder de convocatoria difícil de igualar.

Si el descenso de las canoas en el mes de agosto es un acontecimiento conocido a nivel internacional, la XXVIII edición de las carreras de caballos que tendrá lugar mañana, viernes, día 14, y el sábado, día 15, es uno de los espectáculos de mayor plasticidad y belleza de cuantos se puedan disfrutar.

La playa de Santa Marina se convertirá en hipódromo de excepción por el que correrán, a partir de las 12.30 horas, coincidiendo con la bajada de la marea, los caballos más bellos en una espectacular contienda. Esta prueba mantendrá también, por segundo año consecutivo, el formato de dos jornadas, es decir, disputar las competiciones el viernes y el sábado. Además, también por segundo año, se mantiene el rango de competición, denominado tercera categoría, en la cual se medirán los caballos de pura raza árabe.

Esta categoría responde a una demanda que desde hace años vienen realizando los participantes en estas carreras así como los amantes del deporte de la hípica.

Todo empezó con una apuesta

En los años ochenta del siglo pasado varios riosellanos aficionados al mundo de la hípica cruzaban unas apuestas acerca de cuál de sus caballos sería el más veloz en un recorrido por la playa de Santa Marina, aprovechando las buenas mareas y la ausencia de bañistas en el arenal durante esa época del año.

Lo que inicialmente nació como una actividad propia de los amantes locales de la equitación fue evolucionando y aumentando en número y en calidad los caballos participantes, incorporándose a la competición cuadras procedentes de otros municipios asturianos y de otras comunidades autónomas, hasta convertirse en una prueba hípica de referencia en el norte de España.

El entorno en el que se celebran hacen de estas carreras de caballos unas de las más peculiares de nuestro país, ya que son muy pocas las pruebas hípicas en España que tienen como marco una playa tan espectacular como la playa de Santa Marina de Ribadesella, que al disponer de un paseo marítimo elevado sobre el arenal permite al público tener una perfecta visión de todo el recorrido.

Las carreras se disputan en un trazado de ida y vuelta, con giros que dan a la prueba un mayor grado de espectacularidad, y que a la vez permite conocer la destreza de los jinetes en su monta.

Esta peculiaridad hace que las carreras de caballos de la playa de Ribadesella se hayan convertido en el espectáculo deportivo del oriente de Asturias con mayor número de público asistente tras el Descenso Internacional del Sella, habiendo llegado a congregar en el paseo de la playa de Santa Marina a más de 30.000 personas para seguir en directo estas carreras.

6.000 euros en premios

La dotación total en premios de la edición de este año de las carreras de caballos Playa de Ribadesella que patrocina LA NUEVA ESPAÑA es de 6.000 euros; como en ediciones anteriores, participarán en estas pruebas amateurs caballos procedentes de cuadras asturianas, gallegas y cántabras. Asimismo , y para la jornada de mañana, se va a ofrecer al público espectador el espectáculo ecuestre denominado Magos de la Equitación, a cargo de la prestigiosa escuela hípica El Centauro de Valladolid.

También mañana, viernes, se ofrecerá al público asistente un espectáculo ecuestre en la zona final de la playa Santa Marina, que se iniciará a la finalización de las carreras. Este espectáculo, denominado Magos de la Equitación, de una hora de duración aproximada, será desarrollado por la prestigiosa escuela hípica El Centauro de Valladolid. El espectáculo está compuesto por una gran variedad de números de doma en libertad, vaquera, alta escuela, aires altos (elevadas, cabriolas, posadas, corbetas, balotadas), fuego (bonita coreografía montada por caballeros con capotes negros y sombreros de ala ancha, largas antorchas de fuego, todo ello al compás de bellas bailarinas), acrobacias a caballo, doma de fantasía (jacas a la grupa), trabajo a la amazona. Todo ello con la participación de 12 espectaculares caballos.