Una multitud ha despedido esta tarde en la localidad burgalesa de Villarcayo a Gonzalo Basurto, el piloto de karting de once años fallecido tras sufrir un accidente durante los entrenamientos del Campeonato de Asturias en el circuito Fernando Alonso de La Morgal, en Llanera.

Relacionadas

El silencio se apoderó de la localidad que permanece hoy de luto tras el trágico suceso, además se han suspendido las fiestas del pueblo. La afluencia de vecinos al funeral ha provocado que la calle de la iglesia de Villarcayo, abarrotada desde media hora antes del inicio del oficio religioso, se tenga que cerrar el tráfico.

El cuerpo de Gonzalo Basurto fue trasladado ayer tarde hasta su pueblo natal, donde desde las once de esta mañana se ha instalado la capilla ardiente que ha sido visitada por cientos de personas que han querido arropar a la familia de Gonzalo, muy conocida en la zona.

Gonzalo Basurto estaba realizando la última manga del entrenamiento para el Campeonato de Asturias que, finalmente, quedó suspendido, cuando impactó con otro kart al tomar una curva. Su vehículo se fue sobre el "piano" que señaliza el final de la pista y salió despedido. La fatalidad quiso que el pequeño cayera de cabeza sobre el asfalto y que el kart se precipitara sobre su cuerpo.

Los servicios médicos que estaban en el circuito lograron estabilizar al pequeño, que superó una parada cardiorrespiratoria antes de ser trasladado de urgencia en una ambulancia al HUCA. Su estado ya era crítico.

Pese a los esfuerzos de los facultativos, el niño, que había viajado a Asturias acompañado de su padre, fallecía de madrugada. El cadáver permaneció en el centro hospitalario, ya que la familia ha decidido donar sus órganos. Los progenitores han sido tratados por psicólogos.

La intención de la familia era que los restos mortales del pequeño fueran trasladados lo antes posible hasta su localidad natal de Villarcayo, donde la noticia de la muerte del niño, que sentía pasión por los coches y por el fútbol, ha sido acogida con auténtica conmoción.