Susana Díaz ha defendido esta mañana en Gijón la necesidad de que el PSOE ponga "a las personas por encima del territorio". La presidenta de Andalucía y candidata a secretaria general del partido, se escabulló de la polémica desatada entre los aspirantes de las primarias a cuenta del modelo de Estado que defiende cada uno asegurando que quiere "una España moderna, federal, plural, pero también solidaria y sensible, una que garantice la igualdad".
Díaz expuso su defensa de la Declaración de Granada, en la que los socialistas optan por llevar el modelo federal a la Constitución, en mitad de un discurso en el que reclamó para sí las esencias del socialismo "de siempre", el de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, el "partido rebelde que lleva 140 años siendo de izquierdas", dijo en un mensaje que no citó como destinatario a Pedro Sánchez.
Ante aproximadamente un millar de personas, muchas con cargos de responsabilidad ahora y en el pasado, Díaz habló a todo el Gobierno del Principado salvo su presidente, que cultiva la neutralidad como máximo responsable de la gestora, y el consejero de Empleo, Francisco Blanco, que en el proceso de primarias apoya a Patxi López.
Se dirigía a un auditorio en el que estaban además algunos alcaldes de hoy y ayer, los expresidentes del Principado Vicente Álvarez Areces y Antonio Trevín o todo el grupo parlamentario socialista excepto Javier Fernández y el secretario de organización de la FSA Jesús Gutiérrez.
La presidenta andaluza empezó su intervención levantando oaplausos al referirse a Fernández como "un gran socialista" y construyó a continuació un discurso muy dirigido a las entrañas de los socialistas, invitando sin nombrar a nadie a que el PSOE "deje de mirarse el ombligo y le explique a este país que tenemos un proyecto para volver a hacernos cargo de él". Los organizadores del acto aseguraron haber alcanzado un aforo de 1.200 personas.
Después de una semana convulsa por los insultos que recibió del senador de Compromís Carlos Mulet hizo Díaz una llamada al "respeto", cargó contra el presupuesto "infame" del Gobierno popular, defendió el carbón autóctono en las centrales térmicas y la minería más allá de 2018 y edificó su programa sobre la defensa básica de la educación gratuita desde "los cero años", la sanidad pública, gratuita y "sostenible" y la defensa de la ley de dependencia, que rebautizó como "ley de la dignidad". Prometió que lo primero que exigirá si es elegida secretaria general el domingo será que "de manera inmediata y urgente se firme el pacto contra la violencia de género".
Protesta de tres estudiantes
Durante el acto de Susana Díaz en el polideportivo de El Llano, tres jóvenes fueron sacados del local, uno de ellos a rastras, después de que profirieran gritos contra Javier Ferrnández y mostrasen un cartel en mitad de la intervención de la candidata. Se fueron gritando "Javi, qué pasa, bájanos las tasas", en referencia a las universitarias.
