"Tenemos una sensación de agobio, sobre todo, por si hay una emergencia porque el recorrido al hospital ahora es el doble". Así describe, Estrella Gutiérrez, vecina de San Antolín de Ibiasl lo que supone tener cortada al paso la carretera del Pozo de las Mujeres Muertas, AS-29, para el concejo de Ibias. Fue la tarde del lunes cuando un desprendimiento de rocas de grandes dimensiones cayó sobre la vía causando su corte total. Aunque los trabajos ya se han iniciado aún no hay previsión de cuándo se podrá retirar el "argayón".

La alcaldesa, Silvia Méndez, trasladó al Consejero de Infraestructuras la necesidad de que la obra de retirada del argayo se lleve a cabo "con la máxima celeridad posible", porque recuerda que afecta a prácticamente todo el concejo de Ibias, aunque reconoce que la obra "es complicada y aparte de abrir el paso, se tendrá que asegurar la zona".

Con el puerto del Connio cerrado y con la única alternativa para salir del concejo establecida en la carretera AS-212 que comunica Ibias con el concejo de Degaña, los vecinos sienten que han retrocedido varias décadas atrás, ya que este recorrido les supone el doble de kilómetros para llegar a Cangas, que calculan al menos en una hora y media de tiempo. "Nos sentimos abandonados, no se entiende por qué no se limpia el puerto del Connio, antes era nuestra única vía y desde que tuvimos una quitanieves en los ochenta no nos quedamos nunca aislados", subraya José Ron.

José María Cancio también cree que debería habilitarse el puerto del Connio "porque es una carretera con la que estamos familiarizados y que no nos asusta". Cancio rememora que a principios de los ochenta, siendo alcalde, el Ayuntamiento había adquirido una pala quitanieves. "Íbamos de noche a abrir el puerto para que los mineros fuera a trabajar a la mina de Vega de Rengos (en Cangas del Narcea)", recuerda. En aquella época, los inviernos eran más largos y ya comenzaban en el mes de noviembre, "pero limpiábamos todos los días", asegura. Antes de la llegada de la maquinaria, la situación era mucho más difícil y la carretera se mantenía cortada meses siendo la salida del concejo a través de las barcas del embalse de Salime.