El coche autónomo, un vehículo robótico autoconducido, será el motor de la economía del futuro ante el reto del envejecimiento. Así lo aseguraron en el foro "Ageingnomics", promovido por Mapfre y la Universidad de Deusto. Este espacio de debate se centró en el envejecimiento de los potenciales consumidores. Según sus cifras, el 40 por ciento del consumo lo llevan a cabo mayores de 60 años, por lo que el aumento de la esperanza de vida lleva a pensar que la movilidad será fundamental para estas personas. Los vehículos autónomos permitirían solucionar este posible problema futuro: otra opción son los coches compartidos.