La presidenta del Partido Popular asturiano, Mercedes Fernández, y la exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, entraron juntas, mano a mano, en la reunión del primer comité ejecutivo presidido por el nuevo líder de los populares: Pablo Casado.
Fernández pasó el tiempo previo al inicio de la reunión en un corrillo con destacados dirigentes del partido alineados con Cospedal, entre ellos la que ha sido nombrada nueva portavoz parlamentaria del PP en el Congreso, Dolors Montserrat, exministra de Sanidad.
La relación entre la presidenta asturiana y la ex número dos de Rajoy en el partido sigue firme pese a que Fernández decidió en el último momento dar su apoyo a la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría, una vez que la de Cospedal se había descabalgado y pese a que la mayoría de los afines a Cospedal se habían alineado con Casado. Fernández justificó esa decisión con el argumento de que había optado por la candidatura que había sido la segunda más votada en Asturias, para así trasladar en cierto modo el parecer territorial.
Las evidentes muestras de simpatía y buena relación entre Cospedal y Fernández durante esta mañana, antes de la reunión del Ejecutivo, dejaban claro que la presidenta asturiana cuenta con el respaldo del bloque del partido que lidera Cospedal y que fue el que aupó a Casado a la presidencia.
De hecho la presidenta del partido en Asturias se encontraba presente en el momento en el que se saludaron Montserrat y su antecesor en el cargo, Ignacio Hernando, ambos con evidentes muestras de complicidad.
La concejala avilesina y secretaria general de Nuevas Generaciones, Reyes Fernández Hurlé, también participa en la reunión del Ejecutivo después de que Pablo Casado la integrase en su candidatura.
El Comité Ejecutivo, previsto para las doce del mediodía ha comenzado con retraso, ya que la nueva dirección del PP quiso escenificar quienes son ahora los nuevos rostros que dominan el partido. Pablo Casado, el último en llegar al hotel barcelonés en el que se celebra el cónclave, fue recibido a la puerta del edificio por dos de sus más fieles colaboradores, a los que ha premiado en el nuevo organigrama. El primero, Teodoro García Egea, diputado en el Congreso por Murcia y que fue su responsable de campaña en las primarias, será el nuevo secretario general del partido. El segundo, Javier Maroto, que asumirá la secretaría de Organización del PP.
El nuevo Partido Popular cuyo organigrama estaría formado por "los mejores", en palabras de Pablo Casado, ha arrancado con la clara ausencia de notables afines a la candidata derrotada, Soraya Sáenz de Santamaría. Las negociaciones desarrolladas en las últimas horas para tratar de incorporar a dirigentes "sorayistas" al Ejecutivo no fructificaron.
Tampoco han abundado las incorporaciones de anteriores integrantes del Ejecutivo de Mariano Rajoy. Únicamente Alberto Nadal, ex secretario de Estado de Presupuestos, ha aceptado asumir la secretaría de Economía. Ni los exministros Fátima Báñez ni Íñigo de la Serna han aceptado formar parte de la nueva dirección del partido, después de que fracasase el intento de Sáenz de Santamaría de arrancar a Casado un reparto en cuotas.
