Buen tiempo y mala mar para disfrutar de las playas. Los servicios de salvamento cerraron ayer al baño un total de 25 arenales, mientras que el resto permaneció con banderas amarillas salvo siete en toda la costa asturiana. Las previsiones para hoy son idénticas. La razón es el fuerte oleaje y las corrientes, provocados por una borrasca en el Atlántico Norte. Los equipos de socorrismo de las playas reclaman "sentido común", que se atienda al estado de las banderas y que en caso de estar permitido el baño, se realice en las zonas específicamente acotadas para ello.

Las olas llegaron a alcanzar ayer los dos metros de altura, inusual en las épocas estivales. Pero además, la periodicidad -tiempo que pasa entre una y otra- era de sólo 12 segundos. Esta proximidad es la que provoca las peligrosas corrientes que pueden arrastrar a los bañistas hacia el mar.

Ignacio Flórez, coordinador de Salvamento de Castrillón, explicó que estas condiciones afectan a unas playas más que a otras según su orientación. Por ejemplo, Salinas, Verdicio, Xagó y Bayas están más expuestas al oleaje, mientras que otras como La Concha de Artedo, Luanco y Santa María del Mar lo están mucho menos al estar más protegidas y ser menos abiertas.

Las previsiones para hoy son de sol y subida de temperaturas. Además, en la localidad de Salinas (Castrillón) se celebra estos días el Festival Internacional de Longboard , que concentra a numeroso público.

Los socorristas reclaman "sentido común" para evitar incidentes como los que se produjeron el año pasado, cuando hubo que cerrar varias playas y algunos bañistas desobedecieron las indicaciones de los socorristas, a los que se llegaron a enfrentar. Algunos ayuntamientos, como el de Llanes, llegaron a plantear incluso la posibilidad de implantar una normativa que permita sancionar a quienes hagan caso omiso de los miembros de salvamento.