Teresa Solares no cambia su vida en Carbayín Bajo, concretamente en Los Poyos, Pumarabule, por nada del mundo. Su vida no puede ser más placentera en el pueblo en el que se instaló junto a su marido y formó su familia. Ahora bien, ella es mujer de costa. Nacida en Tazones (Villaviciosa), donde vivió su infancia y parte de su juventud, ya muy joven se puso a trabajar. "Estuve unos cuantos años en un local de hostelería en trabajos de barra y comedor en Tazones. Luego conocí al que hoy es mi marido, en un baile; nos enamoramos y nos trasladamos a vivir donde estamos hoy, pues aquí estaba su casa familiar", afirma Tere Solares mientras ultima un pedido de pulseras de cuero en su taller.
El hecho de vivir en Carbayín no le impide regresar de vez en cuando a su tierra natal, matizando, eso sí, que ambos lugares son muy diferentes para vivir. "Yo llevo viviendo en Carbayín 36 años y no me falta de nada. Tazones ye muy guapo, hay muchos bares, muches coses, pero aquí tenemos médicu, farmacia, estamos muy bien comunicaos por autobús y por carretera; vamos, tenemos de todo y, además, viviendo en el campo. Yo no echo para nada de menos vivir en una ciudad", matiza.
Mujer con inquietudes, hace más de veinte años su primer contacto con un curso de manualidades en el colegio local la hizo meterse de lleno en el trabajo del cuero, empezando a hacer pequeños trabajos que la gente le demandaba. Por ese motivo, y mientras trabajaba, acudió a diversos cursos sobre este tipo de artesanía hasta convertirse en la profesional que es hoy. "Me dí de alta y en 2004 ya empecé a salir a los mercados casi todos los fines de semana. Hago tanto bolsos como cinturones, pulseras, llaveros, carteras y otros artículos en piel. No se vende mucho, parece que esta crisis se está alargando demasiado. Por otro lado, creo que hay que defender a los artesanos de los que no lo son y no mezclarnos a todos en algunos mercados que se muestran con la palabra 'artesano', porque eso nos perjudica a los primeros", matiza.
En cuanto a vivir en el campo, Teresa Solares, que firma su trabajo con su nombre y apellido, afirma que "yo en Carbayín vivo de maravilla, respires aire puru, ye todo natural. Yo creo que se puede emprender en el mundo rural, pero teniendo alguna ayuda de la Administración que apoye a la gente campesina y a los que quieren volver a los pueblos a vivir y a trabajar", señala.
