Modernizar la típica lata de la fabada, atraer a los mayores a la banca online o impulsar la compra de pescado en el supermercado. Son ejemplos de retos de tres empresas asturianas (Nestlé, Liberbank y Masymas) que tendrán que resolver estudiantes de la Universidad de Oviedo dentro del programa "Sí, somos innovación". La Fundación Universidad de Oviedo y el Ayuntamiento presentaron ayer una nueva edición, en la que participarán también EDP y Alsa. Las compañías piden "ideas locas y rompedoras" a los alumnos, ya que, reconocen sus directivos, "nosotros estamos forjados en el mismo patrón empresarial y casi todos tenemos las mismas". La decana de la Facultad de Economía y Empresa, Carmen Benavides, aprovechó el acto para poner en valor la colaboración entre empresa y Universidad: "Nos necesitamos mutuamente".

El programa, que busca favorecer la creatividad y la innovación y mejorar la empleabilidad, ofrece a 45 alumnos -de todas las titulaciones con sede en Oviedo- formación empresarial y la oportunidad de visitar las firmas a las que ayudarán. Con "Sí, somos innovación" ganan los estudiantes, pero también las empresas: reciben un soplo de aire fresco y solucionan sus problemas. Los de Alsa tienen que ver con el servicio de "Centrobús", antes llamado "bus universitario". Pese a los esfuerzos por romper con el apellido, la compañía no ha logrado atraer a otro tipo de usuarios, según aseguró Antonio Fernández, del departamento de selección y formación. "El 90% de los viajeros siguen siendo universitarios y funcionarios", recalcó. Este es el reto que tienen en sus manos los estudiantes.

EDP, por su parte, planteó cinco: transformar los kilovatios en palabras -o, lo que es lo mismo, hacer más atractiva la factura-, definir desde cero una compañía eléctrica para jóvenes, impulsar el vehículo eléctrico, fomentar el autoconsumo y potenciar el uso de las herramientas digitales. Liberbank tampoco se quedó atrás y propuso cuatro: qué le pedimos a un banco para sacar adelante una idea de negocio, diseñar la oficina del futuro, mejorar la imagen de la banca y conseguir que los mayores utilicen la banca digital -hoy en día acceden online solo el 4% de los usuarios de 65 años-. El reto de Nestlé es uno y muy claro: ¿cómo modernizar la imagen de la lata de Litoral? No sólo la de la fabada asturiana, la más famosa, sino la de toda su gama de productos: guisos de patatas, legumbres y vegetales. Por último, Masymas expuso una de las preocupaciones que tienen hoy en día los supermercados: la bajada en el consumo de pescado. También piden ayuda joven para hacer más atractivas las redes sociales e incluir nuevos surtidos.