El propietario de la empresa SEM, Félix Baragaño, presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, sostuvo ayer en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Villaviciosa que el fallecimiento de un prejubilado de la empresa en la finca propiedad de su madre no fue un accidente laboral, sino doméstico, como consta en el atestado de la Guardia Civil, y que él nunca dio la orden de que fuera a trabajar allí. Su defensa ha solicitado que testifiquen la propietaria de la finca y el que fue jefe directo del fallecido.