Cientos de mujeres participaron en la plaza Mayor de Gijón en una concentración (en la imagen) que tuvo muy presente a Lorena Dacuña, la gijonesa asesinada a principios de febrero por su expareja, con una llamada "contra todas las violencias que sufrimos las mujeres". Especialmente jaleado fue el manifiesto en su referencia a la reinvindicación de "nuestra diversidad", porque "la alianza entre el movimiento feminista y LGTBI es innegable, y la conquista de derechos de unas son una conquista de derechos para todas". La doble violencia hacia las mujeres con diversidad funcional o la situación de las migrantes también protagonizaron la concentración.