Una investigación de la Universidad de Oviedo del que la institución académica se ha hecho eco hoy ha establecido que la rasa costera cantábrica -el relieve plano existente entre la costa de Cantabria y la de Burela (Lugo)- se ha elevado más desde Cabo Peñas hacia el oriente que hacia el occidente. La elevación, de naturaleza homogénea en dicho tramo de la zona centro-oriental asturiana, está relacionada según el estudio con el espesor de la corteza terrestre en el margen cantábrico. Los resultados del estudio, desarrollados en el marco de dos proyectos de investigación, acaban de ver la luz en la revista “Geomorphology”.

El origen de la rasa costera cantábrica está ligado a la acción del mar y se corresponde con una antigua plataforma de abrasión marina (la que hoy vemos en cualquier playa actual). A partir de modelos digitales del terreno de alta resolución y mediante potentes programas informáticos, la Universidad ha investigado exhaustivamente su geometría. Al Oeste de Cabo Peñas, la rasa va disminuyendo su altura progresivamente, hasta desaparecer en la zona de Burela. En Cabo Peñas se ha observado una ruptura en la rasa costera y un salto de 50 metros en su altura. Esto se debe al movimiento de la conocida falla de Ventaniella.

Con esta investigación, según explican desde la Universidad, se ha podido desvelar distintas incógnitas sobre la evolución tectónica de la rasa en los últimos cientos de miles de años y se ha establecido un nuevo modelo regional de elevación del margen cantábrico, al comprenderse mejor cómo se ha producido dicha elevación. Las y los firmantes del estudio, titulado Artículo: “Comprehensive characterization of elevated coastal platforms in the north Iberian margin: A new template to quantify uplift rates and tectonic patterns”, han sido Carlos López-Fernández, Sergio Llana-Fúnez, Gabriela Fernández-Viejo, María José Domínguez-Cuesta y Luis María Díaz-Díaz del Departamento de Geología de la Universidad de Oviedo.