Matilde Martínez tiene una casa con apartamentos rurales en Vega de Pope, un pueblo de Cangas del Narcea, y para este verano ya cuenta con cuatro reservas, aunque espera que a medida que se acerque el mes de julio el número de interesados por pasar unos días en su casa aumente. De hecho, asegura que en años anteriores a estas alturas solía tener reservas relacionadas con eventos, pero no para pasar unos días de vacaciones.
"La gente está reservando con tiempo, tres de ellas llegaron durante el confinamiento, por lo que parece que buscan escapar del virus", explica. Por ello, está convencida de que este verano si todo avanza según lo previsto "haya una gran demanda, incluso de turistas de Asturias".
Su casa está situada muy próxima al río, donde se puede disfrutar de una cascada y una zona de baño, además llama la atención por la amplia zona verde que la rodea y que la hace especialmente atractiva para las familias, sus principales clientes.
En la actualidad, uno de sus apartamentos está ocupado por una familia con niños pequeños. Se trata de una pareja que trabaja en el hospital comarcal de Cangas del Narcea y que dejaron su piso en la villa para trasladarse al pueblo. "Después de dos meses de confinamiento en un piso, los niños estaban muy agobiados y nosotros teníamos mucho estrés por el trabajo en el hospital, así que decidimos alquilar este apartamento", explica Martín Menéndez, que espera poder alargar la estancia durante todo el verano. "Nos cambió la situación totalmente, estamos todo el día en el césped, salimos a dar un paseo hasta el río y no nos encontramos con nadie, así que mejor confinamiento, imposible", añade.
En agosto espera disfrutar de unos días de descanso en esta misma casa Alexa Rodríguez, asturiana residente en Bilbao. Alquiló el apartamento ya en diciembre con la intención de asistir al Prestoso Fest y aunque no sabe si el festival podrá celebrarse ha decidido que no cancelará su visita a Cangas del Narcea. "El sitio es muy guapo y vamos a poder disfrutar de unos días tranquilos para pasear y con poca gente, algo ideal ahora más que nunca", explica. Además, considera que esta situación tiene que servir para que la gente se decante por el turismo nacional, incluso regional, "para darle un empujón a nuestro turismo de calidad y a nuestros pueblos", subraya.
Con el objetivo de contribuir a mantener el sector turístico en España también ha apostado por Cangas del Narcea la familia de Isabel Grana, de Málaga. Los últimos años habían elegido viajar al extranjero, pero la pandemia del coronavirus ha hecho que este año hayan cambiado sus planes para quedarse dentro del país. "Queríamos que el gasto de nuestras vacaciones se quedara en casa, porque la cosa está muy fea para el sector y tenemos que colaborar", reconoce.
El turismo rural suele ser la elección principal de esta familia cuando decide viajar por España, ya que buscan la tranquilidad de la naturaleza. Algo que en este momento valoran en mayor medida porque "estaremos aislados, tranquilos y en una zona con poca incidencia del virus", recalca la malagueña.
Matilde Martínez confía en que el valor que se está dando ahora al mundo rural por parte de quienes residen en las ciudades y el esperado "boom" de visitantes que se prevé para este verano se traduzca en que "el retorno al pueblo cobre fuerza". Para ello, no se olvida de reclamar que se invierta en dotar de buenas conexiones de internet, para facilitar que las personas puedan desarrollar teletrabajo desde casa, asentados en una zona rural.
