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La pandemia incrementa el reciclaje y cuadruplica los residuos hospitalarios

El cierre del comercio y la hostelería rebajó el volumen de vidrio y papel, pero el confinamiento elevó la recogida de envases y materia orgánica

La pandemia incrementa el reciclaje y cuadruplica los residuos hospitalarios

Vista desde el vertedero, la pandemia que todo lo revuelve ha cambiado el paisaje, ha modificado la carga de trabajo y la de los camiones, ha alterado la forma de trabajar y hasta el número de operarios en los centros de tratamiento de residuos. El virus que ha parado el mundo puso a prueba el horno que incinera los desechos hospitalarios en Cogersa. Pasó de quemar 104 horas semanales -casi quince diarias- a acercarse en la fase alta de la crisis sanitaria al pleno rendimiento de las 168, que serían las 24 del día los siete de la semana. Se trataba de hacer frente a un incremento del volumen del material recibido que en abril multiplicó por más de cuatro el promedio de un mes normal.

La media mensual de destrucción de material procedente de hospitales y residencias computó 33.310 kilos en 2019; el dato del pasado abril se disparó hasta los 135.483, un 307 por ciento y cuatro veces más, a razón de más de 4.500 al día. El horno no paraba y el personal de recogida subió de un conductor a tres. Pese al parón casi absoluto de la actividad, no obstante, la recogida de residuos reciclables incluso aumentó en un marzo y abril sin bares ni comercios abiertos y con la población entera encerrada en casa.

El resumen, incluido en la síntesis del reciclaje durante la pandemia con el que el Consorcio para la Gestión de los Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) responde a una pregunta parlamentaria del diputado de IU Ovidio Zapico, se completa con el detalle ya explicitado por el organismo en el que se cifraba en el entorno de los 100.000 euros mensuales el sobrecoste del tratamiento de los residuos hospitalarios que Cogersa asume desde el estallido de la crisis del covid-19. El plan de contingencia para atender la inflación de estos desechos ha obligado además, precisa la información facilitada desde la Consejería de Infraestructuras, a establecer una estrecha colaboración con el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil para el traslado y eliminación sin riesgos del abundante material contaminado que han generado los centros sanitarios y residenciales en los últimos meses.

También sigue obligada la Administración a una intensificación de la concienciación respecto al reciclaje de la parte cada vez más voluminosa de esos desechos que se genera en los hogares. Con las mascarillas, los guantes y otros complementos incorporados a la lista de accesorios de uso habitual, ha empezado a ser frecuente verlos en el suelo, en contenedores que no corresponden y hasta en el fondo del mar. Y mientras abundan los expertos que alertan de que un reciclaje incorrecto puede ayudar a la propagación del virus, los organismos especializados en el tratamiento de residuos se han afanado en la intensificación de las advertencias: el material de protección debe desecharse con carácter general en el contenedor gris, el de basura mezclada y no reciclable.

La crisis del coronavirus ha agitado también los protocolos de tratamiento de residuos. El volumen de los hospitalarios ha variado muy significativamente y mucho más que el reciclaje tradicional, que ha mantenido las pautas y hasta ha elevado los volúmenes en mitad de la pandemia. Marzo y abril experimentaron un decrecimiento en la recogida de vidrio y papel y cartón -se depositaron casi cien toneladas menos de vidrios en los contenedores verdes y se detectó una rebaja de trescientas en los azules- que Cogersa vincula con el cese temporal de la actividad comercial y de hostelería. A cambio, no obstante, se han incrementado los envases y la materia orgánica que se recoge en el contenedor marrón, por lo que en conjunto, en la suma de marzo y abril, el total de residuos cuya recogida separada se destina al reciclaje ha progresado respecto al año pasado en cerca de seiscientas toneladas: de las 9.578 de 2019 a las 10.154 de este 2020.

En el conjunto del primer cuatrimestre del año, han llegado a Cogersa más de 2.000 toneladas más, con incrementos en todos los segmentos salvo en el de papel y cartón, que se ha mantenido aproximadamente estable.

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