La consejería de Salud declaró ayer en Llanes el que es el séptimo brote de covid-19 en Asturias tras la supresión del estado de alarma. Después de que se detectase un positivo en un empleado del establecimiento hostelero La terraza de Laura, en Villahormes, el rastreo de sus contactos cercanos ha permitido identificar otros tres infectados, todos ellos vinculados tanto al local de hostelería como a la escuela de surf "Skull" que opera en la playa de San Antolín de Llanes.

La maquinaria de Salud para atajar la propagación del virus se activó ayer con un llamamiento para que la clientela y usuarios, tanto de La terraza de Laura como de la escuela de surf Skull, que hayan tenido contacto con los establecimientos y su plantilla entre el 19 julio y el 1 de agosto, se sometan a pruebas de PCR. Para ello deben rellenar el formulario disponible en la web de Astursalud.es.

El pasado lunes, cuando se confirmó el positivo del camarero, el Gobierno regional anunció que se habían tomado muestras a once contactos estrechos del afectado. El joven, según explicó uno de sus jefes, se comenzó a sentir mal el sábado por la noche y acudió entonces al centro de salud. Cuando su positivo fue confirmado, el bar en el que trabajaba durante las noches, el de Villahormes, cerró sus puertas. Y también lo hizo el restaurante del camping María Elena (Celorio), al tener uno de los socios del bar vinculación con este establecimiento. En ambos casos, los dueños decidieron cesar la actividad por precaución y responsabilidad, porque, tal como aseguraron, en ningún momento recibieron la orden de cierre del negocio por parte de la administración regional.

Durante el día de ayer también echó el cierre uno de los chiringuitos de la playa de San Antolín, La Pandina. Lo hacía, dijeron "debido a la preocupación generalizada en las últimas horas y por motivos de seguridad" y porque creían que ésa era "la decisión más acertada hasta tener constancia que nuestra situación sanitaria se encuentra totalmente garantizada".

El Ayuntamiento de Llanes hizo ayer una llamada a la calma, recordó la obligatoriedad de cumplir las normas para frenar la propagación del virus y mostró su colaboración para complementar las medidas de las autoridades sanitarias regionales.

Tal y como informó hace semanas LA NUEVA ESPAÑA, el gobierno regional consideraba muy probable el escenario de que en el mes de agosto se declarasen brotes de coronavirus en Gijón y el Oriente de Asturias, ya que se trata de las zonas con más afluencia de turistas -la villa y el entorno de las playas del concejo son focos de masificaciones frecuentes desde que se abrieron las fronteras-. Precisamente esta circunstancia ha llevado al Ejecutivo autonómico a actuar con celeridad y establecer protocolos de detección masiva.

El consejero de Salud, Pablo Fernández, resaltó ayer que Asturias logra identificar un promedio de más de seis contactos estrechos por cada positivo, destacando el "eficaz trabajo" del personal de rastreo. Con todo, el Ejecutivo autonómico anunció, como adelantó este periódico, que es partidario de poner en marcha la nueva aplicación móvil de alerta de contagios Radar Covid, que se lanzará en todo el país el 15 de septiembre tras el programa piloto desarrollado en la isla canaria de La Gomera. Fernández consideró que "puede ser un complemento muy importante", en el rastreo.

Fernández resaltó que la situación epidemiológica de Asturias "sigue siendo bastante mejor" que la del resto del país, pese a los siete brotes activos tras la detección del de Llanes. El consejero remarcó que la incidencia en el Principado en los últimos 14 días es de 10 casos por 100.000 habitantes cuando la media en España supera los 70 y alguna comunidad está por encima de los 500. Fernández apuntó como muestra del despliegue de Salud que en las últimas 24 horas se hayan realizado 3.000 pruebas, 2.253 de ellas PCR.

En la jornada de ayer, al margen del brote llanisco decretado a la tarde, Salud confirmó nueve positivos, dos de ellos relacionados con el brote del bar gijonés, el mayor hasta ahora de Asturias, con 15 casos. También se conoció un positivo en Viavélez (El Franco).

Instalan un servicio de pruebas PCR en la villa de Llanes

Parte de la zona de La Talá, en la zona oeste de la villa de Llanes, se ha convertido en la sede de un autocovid que comenzará a funcionar a partir de hoy. El servicio, que sirve para realizar pruebas PCR desde el coche, quedó instalado en la tarde de ayer (en la foto) después de que acudieran a tal efecto personal de la gerencia del área VI y varios técnicos del Servicio de Asistencia Médica. Salud determinó abrir el servicio una vez decretó un brote de contagios, con cuatro positivos, en el concejo de Llanes.