Alrededor de 25.000 plazas repartidas entre 140 actividades, con un presupuesto de 400.000 euros y una duración de un mes y medio. Esas son las cifras del programa "Asturias a lo grande", que la Consejería de Turismo del Gobierno del Principado presentó ayer. Se trata, en palabras de la viceconsejera del ramo, Graciela Blanco, de "la campaña más ambiciosa" de la materia realizada por el Gobierno regional. Un esfuerzo que tiene un objetivo claro: desestacionalizar el turismo y, de paso, "alargar la tendencia positiva" del sector en Asturias, después de haber sido la comunidad autónoma española con mayor tasa de ocupación hotelera en el mes de julio, por encima del 50 por ciento.

Este programa, que será "el elemento central" de la campaña para incentivar el turismo durante la temporada baja de la región y que durará del día 1 de septiembre al 15 de noviembre, consiste esencialmente en regalar actividades y experiencias a los turistas que visiten la región, como "incremento del valor añadido" del turismo en Asturias. Así, sin un aumento en el coste del alojamiento, los turistas podrán elegir entre casi un centenar y medio de actividades por cada dos noches de alojamiento.

"Cuanto más larga sea la estancia, mejores serán las experiencias a las que podrán acceder", remarcó Blanco ayer en la presentación de la campaña. Los visitantes a la región podrán elegir entre un amplio abanico de experiencias, desde menús gastronómicos hasta visitas guiadas, entradas a establecimientos culturales o llagares y queserías, actividades en la naturaleza o de aventura, o tratamientos en centros wellness y de bienestar.

"El turismo es un activo esencial del Principado y una pieza fundamental para la recuperación económica tras la pandemia", enfatizó la viceconsejera del ramo, que valoró que el sector "aporta recursos y mantiene el empleo". En cifras, el turismo supone 48.000 empleos y 2.300 millones de euros, ademas de sumar el 11 por ciento del PIB de la región, según explicó.

Por todo ello, el Principado ve necesario "reforzar la temporada menos intensa", y de ahí la puesta en marcha de medidas como estas, "consensuada con los agentes del sector" y fruto de la colaboración público-privada, con 460 empresas implicadas, entre ellas 11 agencias de viajes que crearán paquetes de experiencias.

Todo ello después de los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que sitúan a Asturias como el destino vacacional predilecto para los turistas, con una tasa de ocupación por encima del 50 por ciento, solo igualada por Cantabria. Esto se debe, explica Blanco, a "la excelente gestión realizada por el Principado y a la responsabilidad del sector turístico, cumpliendo con las medidas impuestas". Para la viceconsejera de Turismo, "era fundamental generar confianza entre los turistas, y fuimos los que mejor lo conseguimos".

En este sentido, Blanco condenó situaciones como las vividas este pasado sábado en la Ruta del Alba, con árboles cortando el camino para evitar la llegada de turistas, aunque dejó claro que es "un caso aislado". Con todo, remarcó que el objetivo es que el turismo "mejore la calidad de vida de los asturianos, no que la empeore, y que sea respetuoso con el medio ambiente y sus habitantes".