La hostelería de Gijón mantiene para el próximo miércoles 28 su propia manifestación, al margen de la de Oviedo, que será un día antes. Los convocantes llevan dos semanas con la protesta en marcha, mucho antes de conocerse las últimas medidas del Principado. Esta protesta nació en el barrio gijonés de La Calzada y fue creciendo como una bola de nieve hasta aglutinar a representantes de todo el sector en la ciudad y también miembros de otros negocios.

Estaba previsto que a esta marcha, que sale de la zona oeste y desemboca en la plaza Mayor, acudieran hosteleros de todas partes de Asturias. Si bien, el cierre perimetral de Gijón lo impide. "No somos, ni formamos parte de la manifestación del día 27", aseguran los convocantes. "Nuestro movimiento nace de la unión, debate y contacto entre pequeños autónomos, empresas, trabajadores y clientes, que tiene como un fin luchar por nuestro futuro, todos con una misma voz", reza un comunicado que ayer los impulsores de la marcha distribuyeron por las redes sociales. "En nuestra marcha no está representada ninguna asociación, ni ningún partido, ni sindicato. Todo el mundo tiene cabida, pero nos desligamos de los hechos que pudieran ocurrir ahí", prosiguen los manifestantes en referencia a la marcha convocada por Otea.