El Juzgado de lo penal número 2 de Oviedo ha condenado al pago de una multa de 2.160 euros y a la retirada del carné de conducir durante dos años y medio a conductor que fue sorprendido, sobre la una de la tarde del 5 de diciembre de 2018, circulando a 217 kilómetros por hora por la Autovía de Grado (A-63), a la altura de la localidad moscona de Vega de Anzo.

El conductor iba a bordo de un Audi A5 propiedad de su madre que minutos antes había sido sorprendido por un control de la Guardia Civil en la carretera de Galicia por el interior (N-634), entre Cornellana y Grado, procedente de Belmonte de Miranda. Fue propuesto para sanción por no tener la ITV caducada desde agosto de ese año.

Luego cogió la Autovía y fue sorprendido por un cinemómetro móvil a 217 por hora, en un tramo limitado a 120. Cuando más adelante le pararon, hizo como que se detenía en el arcén y al acercarse los agentes dio un gran acelerón y huyó, dejando atrás a los guardias, que cejaron en la persecución.

En el juicio, el hombre admitió que era quien conducía el coche por la carretera nacional, pero negó ser el que lo pilotaba cuando fue cazado por el cinemómetro en la Autovía y se dio a la fuga. Añadió que se había quedado en Grado con su novia y que el coche lo había cogido "un familiar", pero sin desvelar la identidad de éste, una versión que la magistrada califica de "absurda e inverosímil".

La jueza acepta íntegra la petición de la Fiscalía. El hombre pierde el permiso de conducir, aunque podrá volver a sacarse el carné pasado un año desde el cumplimiento de los dos años y medio de retirada.