Los residentes en los centros geriátricos asturianos –y sus familiares– tendrán que seguir un estricto protocolo si quieren salir de la residencia para celebrar las fiestas navideñas en domicilios particulares.
Las familias que opten por llevarse a sus personas mayores a casa deberán solicitarlo previamente, y acordar la fecha de retorno con el centro, para organizarlo en función de sus características y disponibilidades. Además, uno de los familiares tendrá que hacerse responsable de los cuidados y atención de la persona hasta que regrese y firmar una declaración responsable sobre la idoneidad de la vivienda a la que se le vaya a trasladar.
Según el protocolo de la Consejería de Salud, la persona mayor que abandone la residencia tendrá que hacerlo por un periodo mínimo de tres días, porque para regresar deberá realizar una prueba PCR como máximo 72 horas antes del retorno.
Si la prueba es positiva, ya no volverá al centro, sino que serán las autoridades sanitarias las que decidirán a dónde será trasladada esa persona. Pero si la prueba es negativa, al volver al centro deberá guardar aislamiento durante 14 días.
Las cifras del día
La Consejería de Salud comunicó ayer 127 nuevos casos de coronavirus en la región confirmados el jueves. El Sespa realizó 5.523 pruebas y la tasa de positividad se situó en el 4,04 por ciento, según el criterio establecido por el Ministerio de Sanidad, que realiza el cálculo en función del número de pruebas positivas procesadas, en vez de por casos confirmados.
Las defunciones confirmadas por covid-19 el jueves ascendieron a 15, de las que ocho fueron mujeres de edades comprendidas entre los 69 y los 93 años, y siete hombres, de entre 65 y 94. Tres de estas personas tenían su domicilio en una residencia geriátrica.
Los centros hospitalarios de la región tienen 549 pacientes hospitalizados y otras 117 personas afectadas permanecen en unidades de cuidados intensivos (UCI).
