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Investigan la muerte de un gijonés de 12 años con síntomas sospechosos de covid

“Nadie se lo explica”, lamentan allegados de la familia del niño, amante del fútbol y sin patología previa conocida | No dio positivo en las PCR

Allegados del pequeño, ayer, apoyando a la familia en el tanatorio de Cabueñes. | LNE

Los médicos estudian si la muerte de un niño gijonés de 12 años está relacionada con el coronavirus. El pequeño falleció ayer en la UCI pediátrica del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), después de varios días con síntomas propios de la infección pandémica. Nunca llegó a dar positivo en las pruebas PCR que se le practicaron, pero la sospecha de una reacción inflamatoria tardía poscovid es alta. El cadáver ha sido sometido a la autopsia clínica en el complejo sanitario de Oviedo, cuyos resultados pueden tardar unos días en conocerse.

La noticia de la muerte del niño, que responde a las iniciales E. A. A., ha consternado a la comunidad educativa del colegio de la Inmaculada de Gijón, donde estudiaba. A priori, nadie tiene noticias de que el pequeño padeciera alguna enfermedad previa. Según concretaron varias personas allegadas a la familia, el menor parecía estar bien y estaba dedicando estos días de vacaciones escolares y mal tiempo a jugar a la consola. Luego empezó a tener fiebre, algo que de primeras no sorprende a ningún padre en épocas de frío, pero pronto empezó a mostrar síntomas de estar realmente enfermo.

Tras un primer ingreso en el Hospital de Cabueñes (Gijón), donde los sanitarios sospecharon de una posible peritonitis por referir el joven un gran dolor abdominal y presentar síntomas de infección, fue derivado al HUCA, donde falleció ayer tras un fallo multiorgánico imposible de controlar.

Hasta el resultado de la autopsia no podrá aclararse si el coronavirus fue la causa de la muerte, pero algunos sanitarios lo ven como una opción “muy plausible”. “Está descrito, aunque en España ha habido muy pocos casos, pacientes que tras superar el covid-19 desarrollaron a las pocas semanas un cuadro inflamatorio de este tipo. Provoca una especie de sepsis y este caso coincide, pero no lo confirma”, señalan las citadas fuentes, que incluso refieren que el pequeño presentaba anticuerpos del virus en sangre, pero que “ni siquiera eso sirve de prueba”.

En grupos reducidos, y esperando a la entrada para acceder por turnos, decenas de allegados a la familia acudieron ayer al tanatorio de Cabueñes para apoyar especialmente a la madre del pequeño, que recibió también a familias de la Inmaculada y a varios compañeros de clase del niño. Todos estos corrillos coincidían en lo mismo: “Nadie se lo explica”, porque “pasó de estar jugando a la consola a encontrarse mal, casi de repente”. Todos piden “prudencia” hasta que la causa de la muerte esté confirmada.

Muy amante del fútbol y vinculado a la Inmaculada desde Infantil, el pequeño era muy conocido y querido en el centro. Será incinerado esta tarde. Sus padres se han despedido de él en su esquela con este mensaje: “Peque, nos vemos pronto”. El colegio lamentó ayer en un comunicado a las familias la “triste noticia” del “fallecimiento repentino” del joven.

Pese a que la cifra de muertos por coronavirus en España asciende ya a unos 70.000 (según los datos de exceso de mortalidad del Instituto de Salud Carlos III), de los que el Ministerio de Sanidad reconoce cerca de 51.000, el número de niños fallecidos es muy bajo. Según el Observatorio de Salud en Asturias, el Principado acumula algo más de 1.500 muertos por covid. El fallecido más joven hasta la fecha tiene 28 años. La edad media de las víctimas es de 83,6.

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