La búsqueda del operario de mantenimiento de carreteras del Principado Virgilio García, sepultado por una avalancha de nieve este Año Nuevo, se ha reanudado este lunes en la zona en la vertiente asturiana de la subida al puerto de San Isidro. Se ha continuado con los vuelos del dron al que se ha acoplado un georradar traído de Letonia y a la vez se ha abierto camino desde el lado leonés con máquinas quitanieves para acercarse lo más posible al lugar de la avalancha, al tiempo que se han realizado búsquedas con sondas. Los esfuerzos siguen sin dar resultado, 18 días después del siniestro, que costó la vida al operario César Fernández y dejó sepultado a Virgilio García. No obstante, la gran novedad es que se han encontrado trazas de sangre en la zona, un hallazgo que ha dado esperanzas a la familia de que el cadáver de Virgilio García pueda recuperarse rápidamente.

Al centro de mando de Felechosa (Aller) se desplazó la consejera de Presidencia, Rita Camblor, quien explicó que el riesgo de aludes sigue siendo muy alto. Camblor voló hasta la zona del rastreo junto al gerente de Bomberos del SEPA, Óscar Rodríguez. La búsqueda se centra, explicó, en aquellas irregularidades del terreno detectadas por los dos georradares que han sobrevolado la zona. La tregua en el tiempo ha permitido esta reanudación de la búsqueda, aunque a partir de mañana martes y especialmente el miércoles se espera un empeoramiento del tiempo.

La familia de Virgilio García reclama que se traslade a la zona equipos de perros especializados en la detección de cadáveres. Los de la Unidad Canina del Principado están preparados para la localización de personas vivas, no para fallecidos, como indicó hace unos días la responsable de la unidad. Por ahora, los responsables del operativo no han autorizado el uso de perros especializados en la detección de cadáveres.