La Universidad de Oviedo, y especialmente su prestigiosa Facultad de Química, ha perdido a uno de sus grandes referentes. El catedrático emérito Víctor Riera falleció ayer, a los 84 años de edad, víctima de la pandemia. El funeral por su eterno descanso se oficiará esta tarde, a las 16.00 horas, en la iglesia parroquial de San Isidoro El Real, en Oviedo.
Aunque era natural de Asturias, Riera completó su formación en Zaragoza, bajo el magisterio del profesor Rafael Usón, considerado como el padre de la Química Organometálica en España. En 1982, siendo catedrático de la Universidad de Valladolid, Riera retornó a Asturias para incorporarse a la Universidad de Oviedo. No lo hizo en soledad: le acompañaba un grupo de discípulos con los que dio un nuevo impulso al estudio de la química organometálica, en un departamento que ya contaba con la figura de José Barluenga, con quien Riera trabajó, como él mismo recordaría años después, “duro y codo con codo”.
Entre las personas que le acompañaron en su tránsito de Valladolid a Oviedo estaban investigadores del calibre de Miguel Ángel Ruiz o Vicente Gotor, quien ayer le recordaba como “muy buena persona y muy conciliadora, muy buena persona, además de un gran universitario y un excelente científico”. La capilla ardiente está instalada en el tanatorio Los Arenales.
