La infección por el Coronavirus 2 (SARS.CoV-2), declarada como pandémica por la OMS el 11 de marzo de 2020, fue descrita por primera vez en China. Provoca un nuevo síndrome respiratorio agudo cuyo cuadro clínico en conjunto se ha denominado covid-19, y puede comportarse como un simple resfriado, o como una enfermedad pulmonar progresiva severa. Sus manifestaciones neurológicas pueden presentarse en el sistema nervioso central, periférico y en el músculo esquelético y pueden aparecer antes del debut de la enfermedad, durante la misma y en el período postinfeccioso.

Las manifestaciones más frecuentes del covid-19

La patogenia y la clínica del covid-19 aún se están escribiendo. Pese a ello, las manifestaciones más frecuentes en la fase inicial son la cefalea, que aparece entre un 6 y 23 por ciento de los casos, y las mialgias, que se manifiestan entre un 11 y un 34 por ciento de los pacientes. La aparición de la disfunción olfativa se estima que se presenta en un 12 por ciento de los casos.

Una consulta en Neurofunción Pablo Solares

El coronavirus en el sistema nervioso

Hasta ahora se dispone de muy pocas autopsias que incluyan sistema nervioso en pacientes de covid-19, de manera que la extensión de afectación aún no está bien definida. Sí sabemos que entre los pacientes ingresados, el cuadro clínico más frecuente es la encefalopatía y en los casos estudiados se ha visto que el virus provoca un daño endotelial directo y una activación astrocitaria y microglial que puede justificarla. El delirio puede presentarse al inicio de la enfermedad entre el 65 y el 87% de los pacientes que requieren UCI; y en el momento de la descarga, puede implicar un cierto deterioro cognitivo disejecutivo que debe ser apoyado y atendido.

La afectación neurológica del coronavirus no se detiene ahí. Durante la efervescencia de la enfermedad y en relación con el estado de hipercoagulabilidad que provoca, se ha visto en estos pacientes un incremento del número de accidentes isquemico agudos , así como de hemorragias y trombosis cerebrales venosas. También en la fase aguda algunos pacientes pueden presentar patología neurológica inmunomediada, que puede ser muy severa y en la que se incluyen cuadros desmielinizantes centrales y otros procesos que afectan al sistema nervioso periférico como neuropatías craneales o períféricas, polirradiculoneuropatías y afectación del músculo esquelético.

Las medidas para frenar el covid-19 reducen la propagación de otros virus

Sin embargo, otras comunidades neurológicas, como la inglesa, ya han valorado la incidencia de cuadros periféricos tipo Guillain Barré durante el año pasado y han confirmado que a pesar del covid-19 hubo menor incidencia de esta enfermedad que en otros años. Por tanto, se tiende a pensar que las medidas que se toman para protegerse del coronavirus también influyen positivamente en la diseminación de otras enfermedades víricas que se desarrollan por afectación del sistema inmune. De todas formas aún es precoz afirmar determinados paradigmas, las sociedades neurológicas europeas como la alemana y la española comienzan a publicar sus guías y es necesario tomarse un tiempo.

Un aspecto muy interesante de la patología covid es la presencia en muchos casos de clínica en la fase de convalecencia que se ha denominado “Síndrome post covid persistente” y es mas frecuente en mujeres y en adultos jóvenes. Se reconocen tres variantes aunque en la práctica pueden presentarse mezclados: en la primera predomina una clínica disautonómica con palpitaciónes, hipotensión ortostática, gastroparesia y/o dolor neuropático por afectación de fibra fina. La segunda se caracteriza por un síndrome de fatiga crónica e intoleracia al ejercicio. La tercera, por un sídrome de sifunción cognitiva, fatiga mental, trastornos del sueño y síntomas depresivos. Hasta ahora el enfoque terapéutico de estos pacientes es sintomático y es en este sentido en el que el equipo de Neurofunción puede ayudar específicamente a estos casos. Tanto en las secuelas del proceso agudo como en la clínica propia de la convalecencia.

Parte del equipo de Neurofunción Pablo Solares

Así es el equipo de Neurofunción

El equipo humano de Neurofunción, formado por más de 20 profesionales altamente cualificados, pueden ayudar a mejorar la clínica descrita en el párrafo anterior. Médicos neurólogos, médico rehabilitador, fisioterapeutas, logopedas, terapeutas ocupacionales, neuropsicólogos, psicólogos y nutricionista son los perfiles con los que cuentan en sus centros, situados en Oviedo y Gijon.

¿Cómo trabajan con pacientes postcovid?

Lo primero que hacen es una rigurosa evaluación en la que administran una serie de tests y pruebas a fin de saber la realidad de la problemática para que, posteriormente, el equipo de profesionales puedan diseñar un programa individualizado de tratamiento en base a las mejores evidencias cientificas.