Madrugón. Gran ambiente en las riberas de los ríos asturianos a primeras horas de este domingo de abril, primer día hábil para la pesca del salmón en aguas continentales asturianas.

En el Oriente, las 7.15 horas, con 8º de temperatura, nada menos que 21 ribereños y deportistas entraron en el sorteo de los pertinentes turnos de pesca para el lance de El Puente Romano, en Cangas de Onís, siguiendo la “cultura ribereña”, mediante la extracción de bolitas. Y a eso de las 7.45 horas, tal como acordaron, el primer afortunado empezó a probar fortuna en ese mítico lance salmonero. 

Sorteo esta madrugada en Cangas de Onís.

Las lluvias registradas en la pasada madrugada propiciaron que los niveles de los ríos crecieran, en el caso del Sella más de 80 centímetros con respecto a la jornada anterior, y subiendo. Además, este río baja con bastante turbiedad. Pero, de momento, la ilusión por conseguir echar a tierra el “campanu” de 2021 sigue intacta entre los pescadores que se reparten por numerosos puntos de las cuencas.

La lluvia que cae en estas primeras horas del domingo no disuade a los aficionados, felices de poder iniciar una temporada trastocada por el covid, al igual que la del año pasado.

Eso sí, el cierre perimetral de la región ha impedido que se desplazaran aficionados de otras comunidades autónomas. 

La trucha de El Tilo que parecía el campanu.

Amago en el Cares-Deva

Una de las grandes anécdotas de esta primera jornada de pesca del salmón en Asturias tuvo como protagonista la cuenca del Cares-Deva. Y es que, como aseguran los ribereños, las aperturas dan sustos gordos, sobremanera cuando todos ansian echar a tierra el "campanu" de la temporada. Uno de ellos capturó bien temprano, en El Tilo, un bonito ejemplar de trucha/reo que atacó una mosca de salmón utilizada como cebo artificial. Se comprobó, por mediación de la guardería responsable de la susodicha cuenca del Oriente de Asturias, que se trataba de una trucha y se liberó otra vez.