En la Junta General del Principado, el anuncio de que más de medio Gobierno regional, cinco consejeros y el Vicepresidente, comparecería para notificar gestiones y proyectos de aprovechamiento de los fondos europeos de recuperación alumbró una expectativa que “se evaporó inmediatamente”. Incluso desde la zona de la cámara menos alejada del Gobierno socialista, el diputado de IU Ovidio Zapico lamenta que el ciclo de explicaciones parlamentarias se haya completado ayer envuelto en “mucha indefinición y vaguedad. Falta muchísima información, muchas respuestas a interrogantes”. “El cómo, el cuándo, el dónde, el cuánto…” A ese ritmo, toda la oposición parlamentaria se agrupó en torno al tono y los motivos de este reproche después de aprovechar para el balance la última presencia de la ronda, la de la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, que se llevó del parlamento su reprimenda y las de todos sus compañeros.
“Se ve que hay coincidencia en todos los grupos y hasta un cierto tono de frustración”, describió el diputado de Ciudadanos Armando Fernández Bartolomé. Suya había sido la acusación al Gobierno sobre el uso de la cámara y de “determinadas medidas con afán propagandístico”, suya también la consideración sobre la “oportunidad perdida de pasar de las palabras a la acción, al compromiso, a la transparencia”. En el PP, Reyes Fernández Hurlé dice sentir “miedo” y “desconfianza” por la experiencia pasada de la gestión de ayudas de otros gobiernos socialistas y en Podemos, Rafael Palacios, recuerda también con inquietud los fondos mineros y afirma que “el proceso de selección de los proyectos de los fondos europeos en Asturias se está caracterizando por la falta de transparencia, acceso a la información, control público y buen gobierno”. Pedro Leal (Foro) dice que agradece que los consejeros “comparezcan a petición propia”, pero también espera “que nos vengan a contar algo” y Sara Álvarez Rouco (Vox), que “su información resulta bastante opaca y poco clara”. “¿Qué hacemos aquí?”, había llegado a preguntarse Fernández Bartolomé.
Asturias recibirá 61,7 millones hasta 2023 para la transformación de su modelo de servicios sociales
La Consejera les invitó a entender el momento en el que se encuentra el proceso abierto y dinámico de recepción de fondos europeos y pidió confianza prometiendo gestionarlos “con sensibilidad, siendo audaces y valientes” y huyendo de la inercia. Melania Álvarez venía de cuantificar hasta donde pudo los flujos previstos de financiación europea y los planes de aprovechamiento de su departamento. Asturias dispondrá hasta 2023 de 61,7 millones de euros para apoyar su propósito de amplio espectro de acometer una gran transformación del sistema asistencial de servicios sociales. Serán diecisiete este año, 21 y 22 en cada uno de los siguientes, y la mitad de la cuantía total se irá a la mejora de la atención en las residencias y centros de día públicos, concertados y privados.
El proceso está todavía pendiente de la suscripción del convenio con el Ministerio de Derechos Sociales que permitirá la recepción de estos recursos, algo que Álvarez adelantó para las “próximas semanas” antes de detener la foto fija de la situación actual en la consideración de que por ahora únicamente “tenemos diseñadas las líneas estratégicas de las colgarán los proyectos singularizados” y que los ejecutarán los ayuntamientos, las empresas o las entidades del tercer sector”. Además de las partidas destinadas a centros de mayores, esos 62 millones que se aproximan con el propósito genérico de reforzar el sistema de servicios sociales ofrecen financiación para iniciativas de mejora de la atención domiciliaria y el envejecimiento en casa, la “digitalización del sistema de servicios sociales, la innovación social, el fomento del acogimiento de menores y la accesibilidad”.
Al llegar a las otras de las líneas de ayudas de las que se responsabiliza su departamento, se refirió a los 82 millones que su Consejería tendrá a su disposición para invertir en políticas de rehabilitación de vivienda y promoción de alquileres a precios asequibles, pendientes también de la firma del convenio, éste pendiente hasta septiembre. En una primera anualidad, habrá 28 millones para iniciativas de rehabilitación residencial y una cantidad aún por determinar para la construcción de viviendas destinadas al alquiler social.
Los centros de mayores, con previsión de nuevas plazas, se llevan la mitad de la partida principal
Puso la misma fecha límite, septiembre, para la concreción del capital todavía difuso que recibirá el Principado –de los trescientos millones disponibles en toda España– para hacer frente a proyectos destinados al aliento de la inclusión laboral de las personas beneficiarias del ingreso mínimo vital. “Ahora mismo estamos definiendo el presupuesto estimado que se concretará en ese convenio de septiembre”. Así respondió a las dudas de los diputados de la oposición sobre las fechas, los plazos y el aterrizaje de lo que ahora son líneas estratégicas en proyectos concretos. No hay cifras, aclaró, porque el escenario está muy abierto y no conviene “generar falsas expectativas”.
Álvarez, a la vez portavoz del Gobierno, hizo frente a la crítica por falta de concreción y de respuestas concluyentes señalando hacia el momento preliminar de un reparto de recursos que tiene a “todas las comunidades autónomas en la misma situación” y prometiendo hacer partícipe a la cámara del proceso de seguimiento y monitorización del programa de captación de financiación europea. A preguntas del PP, sí confirmó que el destino de los 62 millones para la transformación del sistema, y del cincuenta por ciento que llegará a las residencias de mayores, incluirá recursos para “la creación de nuevas plazas y la adaptación de los recursos existentes”, vinculando siempre ambos procesos “a la demanda”.
Los fondos de recuperación en la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar
Para la transformación del sistema asturiano de servicios sociales.
El Principado tendrá a su disposición 61,7 millones de euros en tres anualidades, hasta 2023, distribuidos en seis programas:
La atención a personas mayores y el nuevo modelo de cuidados absorberá aproximadamente la mitad de la inversión.
- Programa “Llar”, para la activación de mecanismos que preserven la autonomía en el hogar.
- ”Aramo”, para la digitalización del sistema de servicios sociales.
- ”Texu”, para la generación de ecosistemas de innovación social para la adaptación al cambio social.
- ”Espumerus”, para el impulso del cambio de modelo de acogimiento de menores.
- ”Sueve”, para la mejora de la accesibilidad de los servicios sociales comunitarios.
