Un hombre de 42 años de edad, cuya identidad se corresponde con las iniciales J. A. R. A., resultó herido muy grave esta tarde al caer de cabeza desde un tejado a unos cinco metros de altura en una nave ganadera de la localidad de Bourio (Castropol). El hombre, natural de San Martín de Oscos, sufrió un traumatismo craneoencefálico grave, que obligó a su evacuación en helicóptero al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) en Oviedo, después de que fuese asistido inicialmente por el personal de una UVI Móvil del Servicio Médico de Atención Urgente (SAMU).

El suceso se produjo sobre las cinco y cuarto de la tarde de este domingo, cuando se dio aviso de lo ocurrido al Servicio de Emergencias 112, que a su vez comunicó los hechos a la Guardia Civil. A la zona se desplazó primero una UVI Móvil, cuyo personal, al ver la gravedad de las lesiones que sufría el hombre, decidió evacuarle lo más rápido posible al HUCA, donde quedó ingresado. La presencia del helicóptero causó gran alarma entre los vecinos en la zona, incluso entre las personas que disfrutaban de una tarde de playa en la costa castropolense.

Al lugar donde ocurrieron los hechos también se desplazaron agentes de la Guardia Civil, que se está encargando de instruir el atestado para esclarecer lo ocurrido. Según fuentes del instituto armado, se desconocen cuáles son las causas de la caída y si se está ante un accidente laboral, aunque todo indica que podría serlo. El procedimiento que se seguirá desde la Guardia Civil será el de remitir un aviso del suceso al Instituto de Prevención de Riesgos Laborales de Asturias.

De confirmarse que es un accidente laboral, sería el tercero de gravedad que se registra en Asturias en las dos última semanas. El pasado 24 de junio fallecía Borja Álvarez Riesgo, un trabajador forestal praviano de 40 años, a consecuencias de las graves lesiones sufridas al caerle encima un árbol mientras realizaba trabajos de tala en un monte de eucaliptos situado en la parroquia de Pivierda. Borja Álvarez, que tenía pareja y dos hijos, se encontraba realizando una corta con una procesadora en el monte Baréu, situado en las inmediaciones de Pivierda.

Seis días después fallecía el coruñés de 35 años Alejandro García Pérez, al caer la turbina de un molino eólico en el parque Pico Gallo de Tineo. García Pérez se encontraba en el interior de la góndola en la que se encuentra la turbina y por razones que se están investigando la estructura de fibra se quebró, cayendo el trabajador al vacío por la abertura.

Sindicatos y partidos políticos han exigido estos días que se endurezca la legislación para castigar a las empresas y empresarios que no apliquen los protocolos de seguridad.