“El objetivo principal y prioritario de Asturias es la conexión ferroviaria con Madrid, pero no vamos renunciar a medio o largo plazo al AVE Cantábrico, aunque ahora mismo no sea urgente”, señaló ayer Alberto González, director general de la Federación de Empresarios de Asturias (FADE). Fue su reacción al cambio de planes del Ministerio de Transportes, que ha decidido renunciar a la construcción de nuevas líneas de alta velocidad.
“Decir ‘no’ taxativa y categóricamente a la alta velocidad por la cornisa cantábrica no parece que sea algo adecuado en este momento. Hace falta un análisis coste-beneficio, que no está hecho, en el que se exponga qué significaría para un territorio ultraperiférico como el Noroeste que, por lo tanto, hay que potenciar”, señaló González, quien destacó que el AVE Cantábrico podría tener continuidad también hacia Portugal, lo que abriría nuevas oportunidades a Asturias.
González recordó que Asturias reclama desde hace décadas buenas conexiones por ferrocarril, un medio de transporte “por el que apuesta la Unión Europea dentro de su estrategia de descarbonización. Pero estamos en 2021 y todavía no existe ni siquiera conexión AVE con Madrid”, lamentó.
El director general de FADE exige un estudio en detalle de lo que supondría para Asturias y las demás comunidades afectadas el AVE Cantábrico, y que valore, además de las inversiones que serían necesarias, “otras variables, como las dificultades técnicas o el impacto medioambiental”. Pero también el “beneficio socioeconómico” que reportaría a una zona como el Noroeste, afectada por el despoblamiento, el envejecimiento y el desplome demográfico. “En otros puntos de España sí se están atendiendo las demandas de vertebración”, agrega. De ahí que reclame conocer por qué razón se ha tomado la decisión de renunciar al AVE Cantábrico.
No opinan igual algunos técnicos. Vicente Luque, ingeniero de minas, presidente de la Plataforma Tecnológica “Túneles Pajares” y socio colaborador y miembro del Think Tank del grupo de trabajo Europa de Compromiso Asturias XXI, cree que la renuncia al AVE cantábrico es “razonable” porque “no tiene sentido, ni hay tráfico, ni demanda. No soportaría ningún análisis coste-beneficio. No hay que soñar, no se va a hacer nunca”, añadió.
Luque resaltó que en Asturias se está centrando el debate ferroviario en el transporte de pasajeros, cuando “lo importante para la región es el de mercancías”. Puso un ejemplo: “El trayecto Lyon-París tiene más pasajeros por kilómetro que todos los AVE de España juntos”.
Explicó que Feve transporta 400.000 toneladas al año solo de chapa al País Vasco. Y que si, como se ha anunciado, se potenciará el sector de la biomasa, “el mejor transporte es el ferrocarril”. En este sentido, subrayó que la prioridad, aparte de la conclusión de la variante de Pajares, debería de ser la mejora del trazado cantábrico de ancho métrico. “En el tráfico de mercancías el tiempo no es un problema, pero sí lo es la longitud de los trenes”, explica. Y adecuar el trazado de Feve como un trazado para trenes de mercancías de hasta 750 metros sería “muy importante” para Asturias.
“Por mucho que se hable de la ‘España circular’, el principal destino es Madrid. Y el trayecto con mayor tráfico de España en toneladas por kilómetro es Asturias-Valencia, que mueve más toneladas que todas las mercancías que circulan por el corredor mediterráneo”, destacó Luque. De ahí que señale que la “gran preferencia” para Asturias es la prevista remodelación integral del trazado actual entre Pola de Lena y Gijón.
“Con un sistema de gestión de tráfico ERTMS podría haber un tren cada tres minutos, así que lo fundamental sería dotar al trayecto entre Pola de Lena y Gijón con un tercer hilo”, para disponer, además del ancho AVE, del actual ancho Renfe. El tercer hilo permitiría, según subrayó Luque, continuar con el transporte de mercancías por ancho Renfe con Valencia y añadir la conexión por ancho AVE a Palencia y Europa. Añadió que el transporte de mercancías se llevará una buena tajada de los fondos europeos, una circunstancia que, a su juicio, Asturias debería aprovechar, sobre todo, para acelerar la reforma integral y la instalación del tercer hilo en el trayecto entre Pola de Lena y Gijón.
El “bypass” de Olmedo, “otra oportunidad para Asturias”
La construcción del “bypass” de Olmedo, que conectará las líneas Madrid-Galicia y Madrid-Valladolid (con prolongación tanto hacia Asturias como hacia el País Vasco) permitirá viajar de Oviedo a Zamora en poco más de dos horas, a Orense en algo más de tres y a La Coruña en algo más de cuatro si se habilitan trenes directos, pues no será necesario llegar a Madrid, como ocurre ahora, por lo que se ahorrarán 340 kilómetros y unas dos horas de viaje.
Será “una oportunidad más”, señaló el director general de FADE, Alberto González, pues cree que sí compensarían los tiempos de viaje a Zamora y Orense, aunque quizá no a La Coruña, adonde seguirá siendo más rápido el transporte por carretera. El ingeniero Vicente Luque, por el contrario, cree que ese “bypass” apenas tendrá incidencia en Asturias, pues será difícil que compita en tiempos con la carretera. “No veo mucho beneficio”, indicó.
