La carne de la raza asturiana de los valles se cuenta entre las mejores del mundo y es un auténtico manjar. Cada verano los mejores ejemplares se dan cita en el certamen de Llanera, una de esas citas que ya forman parte de la historia de Asturias. Ahora, al concurso lo acompaña una subasta de reses que se ha convertido en todo un atractivo, tanto por su espectacularidad como por sus resultados.

De la subasta de reses de Llanera al restaurante

Los hosteleros pujan por esos ejemplares de concurso, que reúnen las mejores cualidades. La gran noticia es que esa carne llega a las mesas de los restaurantes y se pone al alcance de todos cuantos quieran degustarla y disfrutarla.

El sabor de las reses y sus propiedades está avalado por las garantías que aporta la IGP Ternera Asturiana, y dentro de ésta, la sección específica dedicada al vacuno mayor.

Las piezas maduran desde el verano en las cámaras de los restaurantes que las adquirieron y ahora alcanzan el punto de maduración ideal para llevar a la mesa. El restaurante La Campana fue este otoño el primero que ofreció el menú de chuletón de vacuno mayor comprado en la subasta. Ahora le toca el turno Pimienta y Clavo, el afamado restaurante moscón que ofrecerá a sus clientes esta deliciosa carne, preparada a la perfección.

De la subasta de reses de Llanera al restaurante

La ternera que se incluye en la carta de Pimienta y Clavo alcanzó los 3.050 euros con un precio de salida de 1.200 euros. Sin duda, los diferentes cortes harán las delicias de todos aquellos que adoran la buena carne, manejada en los fogones por manos expertas.

Los hosteleros saben bien que una res procedente del certamen de Llanera es sinónimo de calidad y sabor, una apuesta segura para llevar a la mesa de su restaurante y sorprender a los clientes. Además, el mimo y la dedicación con la que los ganaderos preparan a los ejemplares del certamen, sin que les falte detalle, hacen que la calidad de la carne sea un extra a la hora de pujar.

De la subasta de reses de Llanera al restaurante

Ganaderos y hosteleros han encontrado en el concurso de Llanera su mejor punto de apoyo, en una tendencia que va a más. Los primeros, porque ven que la subasta les da un extra a la hora de vender sus reses; y los segundos, porque las reses que compran funcionan como reclamo para los clientes al poner en sus cartas “ternera adquirida en la subasta”. Como explica el alcalde de Llanera, Gerardo Sanz, “ este año nos marcamos el objetivo de convertir la subasta en un nexo de unión entre dos sectores que lo están pasando mal y que necesitan todo el apoyo que podamos brindarles: hostelería y ganadería. Más allá del espectáculo que supone, queríamos que fuese una herramienta útil para unos y otros”, añade el alcalde, siempre en primera línea apoyando al sector ganadero.

Alto nivel de calidad

En la edición de este año, ocho restaurantes asturianos pujaron por alguna de las reses que participaron en la subasta. En total se subastaron 12 animales: 4 frisonas y 8 asturiana de los valles, 4 de carne y 4 de vida. “Siete de esos animales eran de ganaderías de Llanera. Todo un orgullo porque demuestra el gran nivel de nuestros ganaderos y su apoyo a la subasta”, destaca el Alcalde. Si bien el animal más caro fue un ejemplar de leche de la ganadería Casa Coto de Tineo, adquirida en 3.900 euros por la empresa de servicios agrarios Futurcamp, las reses de carne fueron muy codiciadas.

Además, otros restaurantes asturianos como La Torre (Llanera), Trabanco (Gijón), Peña Mea (Llanera) o el Restaurante Hotel de Torres (Felechosa) también pujaron por adquirir alguna de las reses subastadas. Como dice Álvaro Fernández, de Pimienta y Clavo, “poner en la carta que la ternera es de la subasta de Llanera es un extra. La subasta nos da publicidad”.

Otro de los hosteleros que pujaron este año explica que “pagar un poco más compensa por la promoción que se consigue. Es una atractivo añadido para ganar clientes”.

Sin duda, la subasta de ganado vacuno de Llanera conjuga todos los elementos necesarios para afianzarse en el futuro: espectáculo, animales de primer nivel y excelente calidad y sabor de una carne con sello de garantía. Ya quedan menos meses hasta que se celebre la siguiente.