Pozo Sotón: un viaje al centro de la tierra

El proyecto turístico de Grupo HUNOSA baja a los visitantes al interior de una mina real en una experiencia que conjuga aventura, naturaleza, memoria y patrimonio industrial

Visitante en el Pozo Sotón.

Visitante en el Pozo Sotón. / Cedida a Lne

Elena Casero

El descenso en la jaula anticipa la emoción de ser minero por un día en el Pozo Sotón. El yacimiento de San Martín del Rey Aurelio alberga hoy un proyecto turístico único que permite a los visitantes adentrarse en las entrañas de la tierra, picando, barrenando y paseando por las intrincadas galerías que fueron tajo y sustento de millares de trabajadores.

La bajada al interior de la mina es un viaje de casi 600 metros de profundidad. Equipados con autorrescatador, cascos con su lámpara de mina, funda y calzado con refuerzo metálico, los turistas descubren la épica del que fue uno de los oficios más comunes de la Asturias del siglo pasado. En una experiencia que conjuga aventura, naturaleza y patrimonio, abrazan la memoria del carbón, proyectando el sacrificio de quienes les precedieron.

Los mineros de Grupo HUNOSA, encargados también del mantenimiento del pozo, les guían por angostas chimeneas con una pendiente media que supera los 43 grados. Junto a ellos embarcan en un tren minero que circula bajo las montañas, pican carbón en un ‘testeru’ y barrenan un frente.

Los visitantes pueden optar por la visita larga y la corta. La primera se prolonga durante cinco horas, y la versión reducida alcanza las tres, tiempos que incluyen la llegada al pozo y tallaje para la indumentaria minera, una breve charla de seguridad y la visita a la lampistería, la casa de máquinas y a la zona de embarque al pie de los dos imponentes castilletes.

Conocer por fuera el Pozo Sotón, declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento y catalogado entre los cien elementos más representativos del patrimonio industrial español también es posible. El recorrido exterior saca la mina ‘a la calle’ y exhibe diferentes máquinas y útiles, así como los diferentes métodos de explotación utilizados en sus más de cien años de historia.

El Centro de Experiencias y Memoria de la Minería (CEMM), instalado en la antigua Casa de Aseos, completa la triple oferta turística del espacio. La instalación recorre la historia de la minería en Asturias desde una óptica de experiencias e interactividad con elementos virtuales y reales.

La primera sociedad en explotar los yacimientos carboníferos de lo que hoy conocemos como Sotón fue, en torno a mediados del siglo XIX, la Compañía Cantábrica de Santa Ana, vinculada financieramente a Herrero y Compañía. La extracción de mineral cesó en 2014 y solo un año después se puso en marcha una experiencia pionera que ha llevado a más de 15.000 personas al interior de la mina en una clara apuesta por la puesta en valor del patrimonio industrial y la salvaguarda de la cultura y la memoria minera.