División en el Gobierno asturiano por el plan para que la multinacional Costco aterrice en Siero

El cambio de las directrices sobre el comercio en Asturias va camino de provocar un choque múltiple entre varios actores políticos y empresariales de la región a cuenta de un único apartado, el que regula la apertura de grandes superficies. Detrás de la tensión, está el proyecto de la multinacional Costco para poner en marcha una de sus macrotiendas en el polígono industrial de Bobes, que apoya fervientemente el Ayuntamiento de Siero y ve con buenos ojos la Cámara de Oviedo. La consejería de Transición Ecológica e Industria, en manos del PSOE, ha elaborado un documento base para la futura normativa que abre la puerta a que la firma estadounidense desarrolle sus planes, inviables ahora por la regulación vigente. Pero sus socios de Izquierda Unida en el Gobierno, que tienen la última palabra desde la Consejería de Ordenación del Territorio y Urbanismo, no están por la labor de ceder en este punto sin un debate previo. En medio, la patronal FADE mantiene una postura neutra por la desconfianza hacia el texto de algunos de sus miembros. Y la Unión de Comerciantes del Principado exige una visión transversal. Con esta disparidad de criterios se reunirá hoy la Mesa del Comercio.

El encargo a Industria de actualizar las directrices sectoriales de Equipamiento Comercial del Principado, que tienen 14 años, se produjo en la recta final de la anterior legislatura. Partió del entonces vicepresidente, Juan Cofiño, después de que la Cámara de Oviedo insistiera en la necesidad de renovar el documento, al entender que el actual penaliza el desarrollo económico, especialmente en las alas de la región, en beneficio de zonas limítrofes de Lugo y Cantabria. Las sucesivas convocatorias electorales paralizaron el nuevo texto, que finalmente se remató hace dos meses, ya con Nieves Roqueñí como consejera. Ese documento, guardado bajo siete llaves hasta ahora, está ya en poder de las partes implicadas. Y casi todas aluden al polémico apartado sobre la instalación de grandes superficies comerciales como principal foco de conflicto.

Según fuentes consultadas, el texto facilitaría el aterrizaje de Costco en Bobes (implicaría una inversión de más de 30 millones de euros y la creación de 200 empleos) al suavizar la prohibición de abrir superficies comerciales con más de 2.500 metros cuadrados para venta en terrenos de ese tipo. De ser así, se haría realidad el deseo que ha compartido públicamente en numerosas ocasiones Ángel García, alcalde de Siero. Pero que choca frontalmente con la postura que mantiene Izquierda Unida, formación que se muestra reacia a llevar a cabo una liberalización que considere contraria al interés general y que debe dar el visto bueno a la futura normativa a través de la consejería de Ovidio Zapico. Además, representantes del sector privado opinan que este cambio en las directrices responde únicamente al caso sierense. Vienen a decir que se trataría de una modificación ad hoc, una mera adaptación de la norma a las pretensiones de la compañía estadounidense. De ahí, que algunos interlocutores den ya por muertas las nuevas directrices de Industria antes incluso de nacer.

En este contexto, se produjo ayer una reunión entre Nieves Roqueñí y Ángel García en la que se trató sobre el asunto. El mismo orden del día que tiene hoy la Mesa del Comercio de FADE, donde se verán las caras dirigentes de las consejerías de Industria y Ordenación del Territorio con representantes de la patronal y de la Unión de Comerciantes. Horas antes, el Principado anunció ayudas por valor de 207.853 euros para impulsar planes estratégicos de comercio por parte de las asociaciones del sector. La convocatoria financiará tres tipos de actuaciones: planes de dinamización comercial (150.000 euros), acciones de digitalización (22.853 euros) y apoyo al tejido asociativo (35.000 euros).

Suscríbete para seguir leyendo