Asturias, un paraíso para descubrir una y otra vez

Asturias merece ser disfrutada una y otra vez. Y una excelente forma de hacerlo es aprovecharse de todo lo que tiene que ofrecer su amplio y rico mundo rural. A sus innumerables atractivos de sobra conocido se le unen parajes y rincones en los que uno no se detiene habitualmente y una gran variedad de propuestas de ocio, restauración y naturaleza. Desde el Oriente hasta el Occidente, uno puede encontrar lugares de increíble belleza y un paraíso absoluto para los amantes de la naturaleza y el excursionismo

Por todo ello, el mejor plan para los próximos días es Asturias, un paraíso que nunca uno se cansa de descubrir y redescubrir. Una y otra vez, el Principado sorprende, enamora y engancha a nativos y a foráneos. Esta Semana Santa, las vacaciones se disfrutan aquí, y el turismo rural tiene todo lo necesario para que así sea. Los asturianos no necesitamos más que salir de casa, coger el coche –a veces, ni eso–, y conducir varios minutos hasta llegar a un destino inolvidable. Y es que, en cualquier momento del año, en Asturias se vive muy bien. Tanto por la vistosidad de sus paisajes y pueblos como por la elevada calidad medioambiental. Además, aquí se come fenomenal, y eso siempre se valora mucho. Y es que hay pocas recetas como las nuestras, preparadas con materias primas de la mejor calidad y con una equilibrada combinación de mimo y sabiduría que hacen que su sabor sea insuperable. Fabada, pescados, cebollas rellenas o cualquier receta con Ternera Asturiana son un buen ejemplo de ello.

Todo asturiano debe hacer varias veces al año una excursión por el Principado y conocer todo lo que esta región le puede ofrecer. En una tierra tan diversa y original como la nuestra, y tan plural como su nombre, siempre queda algo por visitar. En una época en la que el cuerpo y la mente invitan a volver a lo natural, no hay nada como disfrutar de los nuestro. Y el turismo rural, del que fuimos pioneros en los años 80 del pasado siglo, es una excelente forma de hacerlo.

Ofrece muchos y variados alicientes: la autenticidad de pueblos y aldeas, la belleza paisajística del entorno y el encanto de multitud de rincones donde, a menudo, hórreos y paneras y otros elementos etnográficos cobran protagonismo. Además, hay muchas actividades de ocio para entretenerse: desde conversar con las gentes de la zona, hasta practicar senderismo o cualquier otra actividad de turismo activo. Y por supuesto, no puede faltar la visita a museos, conjuntos etnográficos, castros y otros espacios culturales.

Sin duda, parte esencial del turismo rural son las actividades vinculadas al ecoturismo y agroturismo, y nuestra región cuenta con una amplia y variada oferta en este ámbito. Asimismo, las tradiciones y celebraciones festivas, que abundan en estos días, son un aderezo perfecto para hacer del turismo rural una experiencia única donde disfrutar de una inmersión social y cultural completa y de lo más gratificante. Y es que el turismo rural en Asturias proporciona momentos, escenarios y sensaciones que siempre resultarán inolvidables y sorprende por la historia y la cultura, fascina por la naturaleza y seduce por las gentes y los ambientes.

En palabras del filántropo británico Paul Lister, uno de los benefactores de la Fundación Oso Pardo, "Asturias lo tiene todo para ser referencia mundial del turismo rural".

Ejemplo en toda España

El desarrollo del turismo rural en Asturias es un ejemplo nacional, por el modo en el que se han configurado unos alojamientos totalmente ligados al entorno, en los que es posible empaparse de cultura rural y a la vez recibir un trato exquisito. El Principado cuenta con dos identificables marcas de calidad, "Casonas Asturianas", para los hoteles con encanto y arquitectura singular, y "Aldeas" (Asturias Calidad Rural) para casas de aldea y apartamentos rurales, todos ellos son alojamientos con encanto y con una gran calidad tanto en las instalaciones como en los servicios.