"La única salida a la crisis de Aseava era elegir mi candidatura o ir a elecciones"

"Muy contento". Así amaneció este lunes Amable Fernández. Este ganadero de Soto de Agues (Sobrescobio) ha logrado, tras largos y complicados cuatro años durante los que se ha alargado el proceso electoral, convertirse en presidente de la Asociación Española de Criadores de Ganado Vacuno Selecto de la raza Asturiana de los Valles (Aseava). Fernández –al que acompañan Antonio Cuervo en la vicepresidencia y David Maújo en la secretaría– recibió el apoyo mayoritario de la asamblea el pasado domingo, convocada no sin cierta polémica, ya que una parte de la directiva hasta ahora no la reconoce. El ganadero está a punto de cumplir 54 años y lleva desde 1991 en la explotación familiar que gestiona junto a su hermano, en la que cuentan con unas 200 vacas.

–Llamó la atención la elevada asistencia a la asamblea.

–Sí, hubo muchísima gente y eso dice mucho, ya que hubo bastantes impedimentos a que la celebráramos, llamadas a no asistir... Creo que deja claro las ganas de los socios de querer desbloquear cuanto antes la situación de Aseava.

–Ha logrado un apoyo mayoritario con su candidatura.

–Sí, había unas 550 personas entre las presentes y las que delegaron. Y eso que hubo gente que se marchó al alargarse tanto la entrada. La gente con vacas de leche no pudieron quedarse. El esfuerzo de la junta electoral fue tremendo para que todo saliera bien. El apoyo recibido está ahí. Para presentar una candidatura se pide el aval del 10% de los socios. Nosotros tuvimos los votos el domingo de 539. Nos da credibilidad de sobra y creo que pocas candidaturas hubo que tuvieran ese respaldo.

–Usted apuesta por pasar página. ¿Cuáles serán sus primeros pasos?

–Pues este mismo lunes celebrar una junta de gobierno y tratar de conocer cuál es el estado de la asociación si nos dejan.

–Dice "si nos dejan...". Una parte de la directiva hasta ahora, el presidente y la secretaria, no reconocen la asamblea que le ha elegido. ¿Acabarán en los tribunales?

–Hombre, supongo que algo harán, sí. La asamblea del domingo estuvo convocada por la junta de gobierno, aunque ellos luego quisieron cambiarla de lugar. El presidente y la secretaria lo mínimo que deberían haber hecho es haberse presentado y explicar allí a la gente lo que ellos creen y defienden. Deberían haber dado la cara. Hasta ahora lo único que han hecho es mantenerlo todo bloqueado.

–¿Cree que Aseava logrará esta vez pasar página y abrir una nueva etapa?

–Lo que sé es que la única manera de resolver la situación era esto. Los socios decidieron apoyar mi candidatura, pero también hubo gente que votó ir a un nuevo proceso electoral. No pasa nada. Pero había que defenderlo allí en la asamblea como se hizo. Llevábamos cuatro años parados esperando a que se diera oportunidad a los socios a decidir. Se ha visto que la gente tenía ganas de dar su opinión y la mejor muestra es que allí aguantaron horas y horas sin quejarse.

–Si no hay problemas, ¿cuáles cree que deberán ser sus primeros pasos como presidente?

–Pues ver cómo está la situación interna de Aseava y hacernos con el colectivo. Lo primero abordar esa huelga indefinida de los trabajadores, hablar con ellos y ver qué ha pasado con esos cuatro despedidos. Creo que este mes es el acto de conciliación ante el juez.

–¿Y cómo es la situación económica de Aseava?

–Pues según se explicó por parte de los técnicos en la última asamblea está más o menos bien. Aseava es un colectivo sin ánimo de lucro, solo tiene que ajustar gastos e ingresos, y si hay beneficios pues eso tributa. Aseava está bien.

–Otra cosa es solucionar lo de la marca cárnica Xata Roxa. Se disolvió meses atrás, pero hay deudas con ganaderos.

–Xata Roxa está en concurso de acreedores y debemos esperar a que el juez hable y concrete responsabilidades, si son de los socios, de los trabajadores, de la directiva... Hay deudas con los ganaderos, pero hasta que el juez resuelva no podemos hacernos cargos. Evidentemente son una víctima más de lo que sucedió. Hace cuatro años Xata Roxa iba bien, la gente quería matar y vender su carne con la marca, nadie hablaba de pérdidas... Y luego ya vimos lo que ha pasado. Algo no cuadra y hay que determinar responsabilidades.

Suscríbete para seguir leyendo