La propuesta de la oficialidad que se votará en la Junta: el asturiano sería una "asignatura normal"

La propuesta de la Academia de la Llingua plantea la creación de una Secretaría General que coordinaría las políticas lingüísticas

Partidarios de la oficialidad del asturiano, durante una manifestación.

Partidarios de la oficialidad del asturiano, durante una manifestación. / Fernando Rodríguez

"Una oficialidad razonable con una propuesta de mínimos". Así es como define la Academia de la Llingua Asturiana la proposición que puso la semana pasada encima de la mesa de todos los grupos políticos de la Junta General –salvo Vox– para poder impulsar una reforma del Estatuto de Autonomía que permitiese la oficialidad del asturiano y para la que se necesitan 27 votos a favor. De momento hay 23: los del PSOE e Izquierda Unida, que conforman el Gobierno regional, y la de Covadonga Tomé, diputada del Grupo Mixto. El de Foro está en el aire y el PP ya ha dicho que no apoyará la reforma debido a que el asturiano pasaría a ser obligatorio en la enseñanza, por lo que los números son insuficientes. Xosé Antón González Riaño, presidente de la Academia – institución a la que ensalzaron todos los portavoces, incluido el PP– desgranó un documento, "La lengua asturiana en una perspectiva de oficialidad", en la que se recoge la letra pequeña de lo que implicaría la oficialidad y al que ha tenido LA NUEVA ESPAÑA. Estas son las líneas maestras de la propuesta sobre el cambio de estatus del asturiano, que costaría 25 millones.

La formulación de la cooficialidad

La Academia propone una revisión del artículo 4 de Estatuto de Autonomía, que quedaría redactado de esta forma en su primer punto: "El asturiano, como lengua propia de Asturias, tiene, junto con el castellano, carácter de lengua oficial en Asturias. El eonaviego tiene el mismo reconocimiento como lengua propia y oficial en su ámbito territorial y en las relaciones de los ciudadanos con el Principado de Asturias". En el último se establece que "ninguna persona podrá ser discriminada en Asturias en función de la lengua que libremente elija para comunicarse".

Implantación social

La Academia apuesta por una oficialidad "por fases" y diferencia entre el ámbito social y el educativo. Respecto al social, la institución establece que habría que crear una Secretaría General de Política Lingüistica, que pasaría a estar dependiente directamente de la Presidencia. Sería el principal órgano encargado de organizar la oficialidad en toda la estructura. También se pondría en marcha la "Oficina de Planificación y Coordinación Lingüistica en el Navia-Eo", que dependería de la Secretaría General. Y, además, se crearían Oficinas de Promoción Lingüistica en los concejos.

Medidas en medios de comunicación

El documento destaca que "el asturiano tendría que convivir con el castellano en el actual canal de la TPA (Televisión Pública Asturiana)". Y concreta más: "Ello exige, en buena lógica, que el asturiano ocupe el 50 por ciento de los programas y con la misma especialización que el castellano". Hace un aparte sobre la radio: "La experiencia actual haría perfectamente viable que, con una finalidad de dignificación y renovación temática, el asturiano pudiera ser, sin olvidar al castellano, la lengua de uso mayoritaria". Respecto a los medios privados, la Academia dice que "han de escoger con total libertad su lengua de comunicación y expresión", aunque abre la puerta a medidas de "carácter fiscal o incentivador" y a la "posibilidad de potenciar la publicidad institucional en asturiano en las empresas privadas".

Las medidas en la educación

Es una de las claves de toda la negociación: si el asturiano pasaría a ser o no una asignatura obligatoria, como el resto de materias, o si, por el contrario, seguiría siendo una optativa, como ahora. La propuesta no deja lugar a dudas. "En lo relativo a la implementación de la oficialidad en las etapas educativas de Educación Primaria, Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional y en la Educación Permanente de Adultos el proceso tendría que sustentarse en la experiencia propia de los logros de la escolarización del asturiano y del ego naviego (...). En ese sentido, el currículo de Asturias de esas etapas educativas tendría que adaptarse mínimamente a la situación de oficialidad del asturiano y del eonaviego para ofrecer una materia como asignatura normal y cursada por la generalidad del alumnado (con las exenciones que, en su caso, fijara la normativa autonómica y que posibilita la LOMLOE) y con un horario mínimo que asegure su dominio por parte del alumnado y que podría establecerse, por ejemplo, en tres sesiones semanales". Es esta parte la que el PP relaciona con la "obligatoriedad", que es el argumento que le lleva a rechazar la reforma. La Academia evita hablar o no de una materia "obligatoria", pero su propuesta pasa por que el asturiano sea una asignatura curricular. Respecto al tramo de Educación Infantil, la Academia considera que no haría falta "ninguna modificación profunda", al igual que en la Universidad.

El coste

La Academia también pone cifras concretas sobre lo que costaría implantar la oficialidad y asegura que "tendría que darse una corresponsabilidad del Estado necesario para llevar adelante" la oficialidad. El coste, en cualquier caso, sería de 25 millones de euros anuales (18 para la generalización de la enseñanza en los niveles no universitarios y 7 para la dignificación social del idioma). La Academia establece que la ley que vendría después de la oficialidad debería estar lista en dos meses y su implantación total dudaría dos legislaturas.