Riesgo de cisma en IU: parte de la organización amenaza con ruptura por la lista

La confección final de la lista en Izquierda Unida amenaza cisma. Un grupo de integrantes de la candidatura han emitido un comunicado en el que exigen que el avilesino Fernando Díaz Rañón ocupe el tercer puesto de la lista por la circunscripción central, posición que IU planteaba para el Xabel Vegas, de Más País, como condición para la coalición electoral. Firman el comunicado la hasta ahora portavoz de IU en la Junta, Ángela Vallina, además de Alberto Tirador, Ángel González, Fernando Díaz Rañón, José Benito García Proenza, Lucía Hevia, Luis Álvarez, Faustino Álvarez, José Manuel Martínez y Margarita González.

“Esperamos que haya sentido común y visión política para respetar lo consensuado”, señala el comunicado que advierte que “dada la gravedad del asunto” los firmantes están “a la espera de conocer la candidatura que se registre en la junta electoral y si observamos que se consuma esta propuesta excluyendo a nuestro compañero del número 3, de forma inmediata tomaremos las decisiones personales oportunas sin excluir ninguna, incluso el abandono de IU”. “Ante los chantajes, autoritarismos y decisiones excluyentes no cabe mirar a otro lado”, afirman.

El relato de los firmantes sostiene que la candidatura de IU de la circunscripción central fue aprobada “por los órganos de dirección de forma consensuada” tras un “intenso trabajo de diálogo”. Pero aseguran recibir la comunicación de que “se pretende modificarla de forma sustancial y afectando totalmente al respeto de la pluralidad que representamos”.

La sustitución de Díaz Rañón en el puesto tercero por Xabel Vegas, relegando al avilesino al quinto puesto, “no es un asunto personal” sino “una evidencia de la intención excluyente de algunas personas dirigentes de IU de Asturias a las que les importa un bledo el respeto a la pluralidad y los acuerdos”.

Los firmantes aseguran que intentaron tratar el asunto con el coordinador de IU, Ovidio Zapico, “pero la callada por respuesta ha sido su actuación”, en lo que consideran una “actitud autoritaria y de debilidad de la dirección”, tomando decisiones que “perjudican a la organización para garantizar otros intereses”.

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