Piedras Blancas,
Marta CASAMAYOR
Guillermo Ballina, secretario de organización de IU y concejal en el Ayuntamiento de Castrillón, murió ayer, en Soto del Barco, a los sesenta y dos años de edad, después de una larga enfermedad. Al veterano político se le había detectado hace dos años un tumor. Ballina falleció en su casa de la Ferrería, en Soto del Barco, aunque vivía en Salinas. Se había trasladado al concejo vecino para descansar y estar más tranquilo. Allí disfrutó de sus últimos días acompañado de su mujer, Ana Suárez, y sus cuatro hijos.
Sus compañeros de partido definieron ayer a Ballina, tras conocer la triste noticia, como un «buen político», además de una «magnífica persona». «La muerte de Ballina supone una gran pérdida tanto para Izquierda Unida como para todos los políticos, sin importar la ideología. Ante todo, era una gran persona», resaltaba la alcaldesa, Ángela Vallina, minutos después de enterarse del fallecimiento.
Guillermo Ballina era secretario de organización de IU de Asturias, en sustitución del que también fuera concejal, Manuel González Orviz. Además, era miembro de la presidencia federal de la coalición. La larga carrera política de Ballina no queda ahí. Durante años ocupó cargos en Comisiones Obreras, formó parte de la ejecutiva regional del sindicato y fue miembro del comité de empresa de Azsa.
Ballina no pudo ejercer su cargo como concejal en Castrillón a causa de su enfermedad. Eso no ha hecho que su pérdida sea menos triste en el Ayuntamiento. «Era una persona muy válida; como hombre, un "crak" y, como político, una eminencia», aseguró Juan Fernández Pérez, concejal de Turismo y Festejos. Gaspar Llamazares y Jesús Iglesias también trasladaron su dolor por el fallecimiento.
Para Llamazares el fallecimiento de Ballina supone la marcha de un «hombre solidario y comprometido con todas las facetas de su vida». CC OO de Asturias también quiso sumarse al pésame. El sindicato calificó a Ballina de un «ejemplo» para todos y destacó su contribución a que «muchas personas se unieran a la lucha de los trabajadores». «Su figura supone un valor de ejemplo y compromiso». Hoy, a la una de la tarde, se celebrarán unas honras fúnebres en el tanatorio de Avilés. Después, a las dos y cuarto, Ballina será incinerado.
