El exsecretario de la Fundación que gestiona el centro cultural de la ría, José Luis Rebollo, critica que a lo largo de la instrucción del "caso Niemeyer", en el que está siendo investigado, no se le ha informado sobre la acusación concreta que se le imputa, siendo objeto de una "investigación general" sobre su labor en la entidad y sobre las relaciones profesionales de su despacho con el Niemeyer. Así se lo expone al titular del Juzgado de instrucción número 2 de Avilés en el recurso que interpuso hace unos días tras haber sido citado a declarar el próximo 14 de septiembre y tras recibir los nuevos informes del perito fiscal, que relacionan a Rebollo con el caos contable entre el Niemeyer y la agencia de viajes con la que trabajaban los exgestores. El abogado ovetense sostiene en su escrito que en su caso se está vulnerando la tutela judicial efectiva, la utilización de pruebas pertinentes para la defensa, la igualdad en la aplicación de la ley y el derecho de defensa, entre otros derechos.
Para Rebollo resulta "inexplicable" que el perito que colabora en la investigación a petición del juez haya emitido un informe "trabajando codo con codo con la Fundación denunciante y con la agencia viajes El Corte Inglés" sin que el exsecretario "haya podido aportar prueba alguna", y reprocha también al representante del Fisco las opiniones que a su juicio recoge en los informes, cuando según la ley debería emitir "conclusiones científicas o técnicas" .
El abogado aprovecha su recurso para insistir en que su despacho hizo todo lo posible por ordenar la situación contable de la entidad que dirigía Natalio Grueso y que preside la Consejería de Cultura del Gobierno regional. Y recuerda que en dos años y medio de investigación no se ha citado a los miembros del patronato para corroborar que no les informó de la situación real de las cuentas de la entidad, como recoge el informe pericial.
También critica en su escrito que en el "caso Niemeyer" se están "mezclando actuaciones diversas relativas al funcionamiento de una Fundación durante cinco años: si uno cobró dinero por servicios y debió hacerlo de otra forma, o si no prestó o cómo se prestó el servicio, o si las retribuciones eran elevadas, o si un contrato se amplió, o si se viajó a no sé dónde y no debió hacerse". En cuanto a su papel en la Fundación del Niemeyer, insiste en que como secretario del patronato no tenía ninguna obligación de informar sobre las cuentas ni de formularlas, puesto que eso corresponde al director general y a la presidenta de la entidad.
José Luis Rebollo incluso recoge en su recurso la necesidad de solicitar la opinión del Tribunal Constitucional para que se pronuncie sobre la larga tramitación del procedimiento (los actuales gestores interpusieron la denuncia en diciembre de 2012). Y es que considera que la duración de una instrucción por un periodo superior a un año puede vulnerar el derecho a la tutela judicial efectiva.
El próximo 14 de septiembre están citados en el Juzgado de instrucción número 2 de Avilés para declarar como imputados, además de José Luis Rebollo, el exdirector del Niemeyer (Natalio Grueso) y al agente de viajes que también está siendo investigado en el procedimiento, J. M. V.
