El exsecretario de la Fundación del Niemeyer, José Luis Rebollo, responsabiliza al Gobierno del Principado de la quiebra en la que acabó la Fundación del Niemeyer hace tres años. El abogado ovetense presentó ayer un recurso contra el auto que dictó la semana pasada el titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de Avilés, que ve indicios de un delito societario y de otro de administración desleal en la anterior etapa gestora del centro. Argumenta que de haberse cometido un delito societario, la responsabilidad recaería en los administradores de hecho o de derecho del Niemeyer, el patronato de la entidad y su presidencia, que hasta ahora ha estado ocupada por las consejeras de Cultura de los sucesivos gobiernos autonómicos. Rebollo pide en su recurso la revocación del auto dictado por el juez Ricardo Badás y el sobreseimiento. El abogado ovetense advierte en su escrito, además, de que las presuntas irregularidades que a su juicio se produjeron en la contratación del mobiliario del complejo cultural están a punto de prescribir, "un hecho que pese a ser denunciado, no ha sido todavía investigado".

En cuanto a la situación de quiebra de la entidad, concluye que se derivó "de la actuación sucesiva de los consejeros de Cultura Emilio Marcos Vallaure y Ana González, con la pasividad o colaboración del patronato, que ni tan siquiera se reunión entre los meses de junio de 2011 y junio de 2012".

José Luis Rebollo insiste en su escrito en que en el procedimiento se ha vulnerado su derecho a la tutela judicial efectiva, puesto que "ha sido privado de las diligencias de prueba más relevantes que solicitó", entre ellas que declaren ante el juez los integrantes del patronato de la Fundación del Niemeyer y responsables de la agencia de viajes investigada. También pone en duda los informes emitidos por el perito de Hacienda que colabora con la investigación del "caso Niemeyer" a petición del juez, al considerar que incluyen comentarios valorativos y que están basados en información aportada por la parte denunciante.

El que fue secretario de la Fundación del Niemeyer entre diciembre de 2006 y junio de 2012 destaca en su escrito que "la administradora de derecho de la Fundación no es ni más ni menos que la Consejera de Cultura del Gobierno del Principado de Asturias". Rebollo expone su versión sobre la aprobación de las cuentas de la entidad correspondientes a 2010, cuando supuestamente los exgestores ocultaron al patronato un agujero por pagos pendientes al principal proveedor del Niemeyer, Viajes El Corte Inglés. "Se prestó asesoramiento por parte de Rebollo Abogados y ni siquiera en circunstanciar normales, sino bajo un parámetro de tiempo muy corto marcado por las circunstancias de la renuncia de las anteriores contables y por la exigencia de la presidenta de querer aprobar las cuentas con anterioridad a las elecciones autonómicas", sostiene Rebollo, que insiste en que en todo momento "comunicó los problemas contables existentes en cuanto tuvo conocimiento de los mismos y los intentó corregir y encauzar". Es más, asegura que "las cuentas" del Niemeyer "estaban mal desde el mismo ejercicio de 2007", es decir, desde los orígenes del proyecto cultural.