Juan, Luis y Sara (nombres ficticios para preservar el anonimato) tienen 41, 50 y 66 años, respectivamente, y llevan entre 7 y 16 en la calle. Ahora dormirán bajo techo, el de su propio hogar. Ellos son los tres primeros beneficiarios en Avilés, y en Asturias, del programa "Housing First" (la casa primero), que ha puesto en marcha el Ayuntamiento en colaboración con el Gobierno asturiano. En el salón de recepciones de la Casa Consistorial firmaron ayer los contratos de cesión de tres viviendas de Vipasa y se fueron llave en mano, en busca de una nueva vida. "Se les está dando la oportunidad de volver a soñar", aseveró Carolina Lombardía Fernández, técnica de intervención social que lleva años trabajando con ellos. "Es una oportunidad brillante para alguien como yo", afirmó un beneficiario.

Participaron en el acto la concejala de Bienestar Social, Yolanda Alonso; el director general de Vivienda, Fermín Bravo, y la directora gerente de Vipasa, María Montes. Bravo, visiblemente emocionado, afirmó: "Para mí poner en marcha este programa es importantísimo". Y señaló que a corto plazo se ocuparán trece viviendas en Asturias (una cuarta en Avilés, la misma cifra en Oviedo y cinco más en Gijón). Las previsiones del Gobierno autonómico pasan por acabar 2017 con una veintena de beneficiarios en el programa.

Varias ciudades española están desarrollando programas de atención bajo el modelo "Housing First", que se caracteriza por facilitar viviendas accesibles y con carácter permanente a personas sin hogar que se encuentran en peor situación a la vez que se realiza un trabajo de apoyo y seguimiento. "En Asturias, somos pioneros en su desarrollo a través de vivienda pública. En otras comunidades se gestiona con una ONG. Aquí, el beneficiario es un inquilino más del parque de vivienda del Principado, con sus derechos y obligaciones. Este plan tiene mucho valor, es una piedra muy importante para sembrar el futuro contra la exclusión residencial", subrayó Bravo.

Las personas que residirán en estas tres primeras viviendas de Avilés son una mujer de 66 años y dos hombres de 50 y 41 años, que cumplen con los requisitos para acceder a este programa: son mayores de 18 años, cuentan con años de vida en la calle y presentan otros problemas asociados, como discapacidad. Los beneficiarios aceptan, como mínimo, una visita semanal del equipo técnico, si bien la frecuencia varía en función de la situación y en los momentos iniciales la atención social es mucho más intensa. "Va a ser un cambio a mejor, un sitio para mis cosas, para tener tranquilidad. Viví en la calle hasta que empecé a cobrar el salario social. Entonces alquilé habitaciones, pero el problema era la convivencia", explicó Juan.

"Housing First" (la casa primero) es un modelo innovador que plantea una forma diferente de afrontar la situación de las personas sin techo. El psicólogo Sam Tsemberis desarrolló este modelo en la década de 1990. Su idea es que la vivienda es lo primero que debemos facilitar a las personas, además del apoyo que les ayude a mantenerse en ella. Los programas bajo este enfoque ofrecen resultados muy positivos, según los expertos: más del 80% de las personas mantienen la vivienda después de dos años.

El Ayuntamiento de Avilés viene desarrollando desde el año 2005 proyectos de intervención con personas sin hogar, integrados en la red existente para la atención a este colectivo, que contempla recursos de alojamiento, ocupacionales, de intervención en calle y de trabajo en red con otras entidades del tercer sector y el SESPA a través de una mesa estable de coordinación (Mesa Local de Atención a Personas sin Hogar).

En el presupuesto de 2017 está prevista una partida cercana al medio millón de euros para la atención a las Personas sin Hogar.