La aplicación del expediente de regulación de empleo (ERE) que está haciendo la empresa Arcelor en sus instalaciones genera especial malestar entre la plantilla de Baterías de coque de Avilés. "No puede ser que hayamos estado trabajando a turnos de doce horas un día y, al día siguiente, irnos a casa regulados", sentenció un trabajador de la destilería de carbón, que hasta hace cuatro días estuvo en riesgo por los daño que generó un grave incendio. "Claramente, el ERE es para ahorrar costes", se lamentó el mismo trabajador.

El ERE pactado entre la empresa y los sindicatos es una herramienta que utiliza las compañía en los momentos en que, según su criterio, se debe acompasar la producción de chapa con su distribución. Se activó dos jornadas en enero y dos en febrero. El resto queda para marzo. La aplicación unilateral de la compañía molestó a los sindicatos, pero se ha establecido una mesa que vigile su aplicación.