Avilés ha rendido esta mañana un homenaje a uno de sus ciudadanos más ilustres, Pedro Menéndez, con una ofrenda floral en la estatua que lleva su nombre del parque del Muelle . El homenaje abre un año de actividades (aquí tenéis el programa) en recuerdo del marino el día que se conmemora el V centenario de su nacimiento. "Hoy, quinientos años después, Pedro Menéndez es una de las grandes referencias de Avilés. Y lo es tanto por sus logros, que hoy son tan incuestionables como históricos, destacando la fundación de la primera ciudad de los Estados Unidos de América, como por sus aptitudes y su actitud ante la vida", señaló la alcaldesa, Mariví Monteserín, después de insistir en que el marino, "pese a sus conquistas, es un desconocido para parte de la población, sobre todo los jóvenes".

La cronista oficial de Avilés, Josefa Sanz, resaltó las facultades del marino avilesino, que recibió los encargos de Felipe II en Flandes y en las Indias. "La figura de Pedro Menéndez estuvo mucho tiempo en silencio", señaló. También habló desde el púlpito, el Comandante Naval de Gijón, Carlos Orueta Lueje, que consideró que la ofrenda de esta mañana "es un acto de justicia" para un "marino inigualable". La banda de música puso el colofón a la jornada con la interpretación del himno de España.

El acto comenzó con un encuentro en El Parche, con las autoridades civiles y militares y representantes de la asociación Pedro Menéndez, que iban ataviados con trajes de época, del siglo XVI. Posteriormente, la comitiva partió en dirección a la iglesia de San Antonio de Padua, donde descansan los restos mortales del marino.

La jornada contó con la presencia de representantes de la Armada, del Ejército, la Guardia Civil, la Policía Nacional y Local y también la de Álvaro Armada, conde de Revillagigedo y descendiente de Pedro Menéndez.